Sergio Ramos llegó a las manos con un intocable de Zidane. El vestuario del Real Madrid calla
Un lío generado por culpa de unas declaraciones del capitán blanco.
Sergio Ramos se ha metido en un jardín que le va a costar salir en el Real Madrid. Lejos de solucionar el tema de su renovación, el capitán madridista se ha metido en problemas con Karim Benzema, el jugador favorito de Zinedine Zidane.
El central de Camas habló en el canal de ‘Twitch’ de Ibai Llanos sobre las carencias del Real Madrid y abrió la puerta de llegada al delantero Erling Braut Haaland con estas declaraciones: «Haaland podría dar mucho al Madrid actual. Sería más fácil económicamente llegar a un acuerdo. Es potente, un referente, con presencia. No estaría mal traerlo, nos daría cosas que no tenemos. No son cosas que dependan de mi a la hora de tomar la decisión. Claro que si el Madrid trae fichajes de gran nivel siempre puedes hacer algo más especial para ganar. Yo siempre quiero ganar».
Como se puede apreciar, Sergio Ramos ligó su continuidad a poder ganar y para eso habría que traer jugadores. Sin embargo, lo que no sentó nada bien en el vestuario fue que diera por hecho que Haaland aportaría cosas que no tienen en la plantilla, algo que molestó sobremanera a un Karim Benzema que está siendo un goleador implacable desde la salida de Cristiano Ronaldo, demostrando además su gran capacidad de remate, el punto fuerte del killer del Borussia Dortmund.
La bronca entre Sergio Ramos y un Karim Benzema que le echó en cara que apoyara la llegada de Haaland parece que no ha sentado nada bien en el vestuario y Zinedine Zidane tuvo que reunir a ambos para acabar con las rencillas.
El técnico galo sabe que están entrando en el momento más importante de la temporada y no quiere que el equipo se desconecte, y menos que sea por cosas ajenas a su responsabilidad dentro del terreno de juego.
