Sergio Ramos la lía con Conte (y Florentino Pérez): Amenaza y chantaje o “Sale la porquería” (y apesta)

El capitán presiona al presidente

Cartas sobre la mesa. Sergio Ramos ha agarrado el toro por los cuernos en un desafío que le puede costar el cuello. El capitán del Real Madrid mandaba un recadito a Conte y Florentino Pérez al final del Clásico: “El respeto se gana y no se impone”. Y ardía el Real y Pérez.

El máximo mandatario blanco no quería ni bajar al vestuario a ver a su jugadores al final del Clásico y sentenciaba a Lopetegui. En la comida de directiva con los mandatarios del Barça, Florentino Pérez confirmaba a Conte como nuevo técnico del Madrid en caso de derrota. Dicho y hecho.

Al término del Clásico, el italiano era virtual entrenador del Real, pero las palabras de Sergio Ramos lo ensuciaban todo. Las conversaciones posteriores al choque entre Pérez y Conte se enfriaban al extremo de quedar, ahora, en ‘stand by’. ¿El motivo? El que sigue.

Florentino Pérez| EFE

El lío con Antonio Conte y el vestuario blanco

El que fuera capo del Chelsea ha pedido garantías absolutas a Pérez de tener el mando del vestuario, al punto de estar autorizado para cargarse a quien hiciera falta, también a Sergio Ramos.

Conte no quiere ser otro Rafa Benítez o Lopetegui: viene a pasar la escoba y a terminar con el ego de una vieja guardia, comandada por Ramos, que cree que el Real es suyo.

El técnico italiano avisa: “Mando yo, no Sergio”. Frase literal que tensa aún más la cuerda. Una información que llega alta y clara al clan del andaluz que no quiere perder poder, ni estatus, en la caseta.

El capitán blanco, en este sentido, amenaza a las alturas con un motín si un perfil como el de Conte pone un pie en el Real. Avisado de lo que le espera al central y amigos, en el Real avierten: «Si sale la porquería, Florentino Pérez no dura un semana«. Un chantaje que tiene al mandatario subiéndose por las paredes.

Antonio Conte | EFE

Sergio apuesta por un perfil dócil

Sergio, que ya lío la de Dios cuando se filtraron conversaciones en la cúpula con Mourinho para su regreso, apuesta por un perfil dócil/afable como son Solari, Guti o Laudrup, aunque también aceptaría a Roberto Martínez, seleccionador belga. Y cuenta con el apoyo de Isco, Nacho, Marco Asensio, Dani Ceballos y Lucas Vázquez, el clan de los españoles.

La propuesta de Sergio pasa por dar galones a un Solari de turno y ganar tiempo a la espera de una solución no precipitada que cuente con el consenso del equipo.

El italiano, por su parte, asume el reto del poner en vereda al Madrid, pero pide a Florentino garantías de poder actuar contra Sergio Ramos si es necesario. Garantías que Pérez no se atreve a firmar.

Florentino está en el punto de mira

El presidente blanco es el gran tapado de la crisis blanca y, avisan, su imagen no aguantaría otro episodio de desgaste con un ídolo del madridismo, como ya ocurrió con Iker Casillas o Cristiano Ronaldo.

Cristiano Ronaldo | EFE

CR7, en este sentido, no ha esperado ni 24 horas para echar más leña al fuego culpando a Pérez del desaguisado que reina en el Madrid: “Florentino me miraba como si fuera prescindible”. Y en el vestuario cada vez son más –Modric, Kroos, Casemiro, Bale y hasta Benzema– los que señalan al mandatario como el gran responsable de la caída libre en la que se encuentra el Real.

Un Florentino que, además, no está ‘enamorado’ de Conte, pero que en cambio sí mataría por Mourinho. El luso es el gran deseado -con Joachim Löw/Jurgen Klopp en la recámara- para dar un último meneo a un Madrid que necesita un líder con carisma.

El plan de Conte, en este sentido, colisiona frontalmente con los deseos galáctico de Pérez que busca construir al Real desde el espectáculo y el gol. El italiano, por el contrario, basa su libreto en un fútbol amarrategui y defensivo, llegando a formar hasta con tres centrales, y al que sólo salvan los resultados.

Sirva como ejemplo que los primeros nombres que Conte ha puesto sobe la mesa de Pérez para reforzar el once apuntan justamente a la defensa. Otro capítulo que incomoda especialmente a Sergio Ramos.

Gareth Bale | EFE

Así juegan los equipos de Antonio Conte

Y es que los aficionados del Real Madrid ya pueden ir despidiéndose del juego de asociación y de toque que ha intentado (sin éxito) implementar Lopetegui desde que llegó.

Conte es otra cosa. A Conte no le importa la posesión, no la busca. Si se la encuentra, juega con ella, pero no es su prioridad. Su prioridad es la de construir un equipo desde la defensa hacia el ataque.

Tanto en la Juventus de Turín como en el Chelsea, donde ha conseguido sus mayores logros como técnico, acabó apostando por una defensa de tres centrales y dos carrileros muy abiertos.

 Antonio Conte | EFE

Un sistema que se está volviendo cada vez más común en todas las ligas europeas. La idea que tiene del futbol el italiano es la de una defensa férrea, que cierre espacios por el centro y que deje las bandas para el ataque rival.

No quiere una presión alta como sí que quería Lopetegui. Sus equipos prefieren resguardarse para luego, una vez recuperan el balón, empezar transiciones verticales para ir saltando líneas de defensa rivales.

Pero para ello necesita jugadores que puedan jugar en ese sistema, y ahora el Madrid no los tiene. O no tiene todos los que Antonio querría. De ahí que ya le haya pasado una lista a Florentino que pone a Sergio Ramos de los nervios.

El primer galáctico de Conte

Y es que ni Neymar, ni Mbappé ni Harry Kane están en ella. Conte prioriza la defensa y la zona media. Cuando ésta esté bien armada, entonces será el turno de los delanteros.

David Alaba| EFE

Futbolistas como David Alaba, De Light, Skriniar, Marcos Alonso (que conoce muy bien del Chelsea), De Jong y Erikssen tienen prioridad de paso. Incorporaciones que irían acompañadas de salidas o de pérdidas de importancia en el equipo. 

Y es que la lista de bajas con Conte al mando no sería precisamente corta. La vieja guardia -con Sergio Ramos a la cabeza-, tendría el cartel de transferible.