Sergio Ramos a gritos (“O lo cogen, o lo revienta”. Y es con un crack del Real Madrid)

El capitán sentencia a un galáctico de Florentino Pérez

Sergio Ramos ya lo avisó la temporada pasada. Gareth Bale no es el crack de referencia que necesita el Real Madrid. Si algo ha demostrado el galés desde que llegó en el 2013 al Madrid es que está muy lejos de ser el líder que se esperaba que fuera cuando aterrizó en Chamartín procedente del Tottenham.

El de Cardiff fue un fichaje de Florentino Pérez para relevar generacionalmente a Cristiano Ronaldo. La del luso había sido una operación de Ramón Calderón, el predecesor de Florentino. Pero el presidente quería que el jugador franquicia del equipo fuera un fichaje suyo y por eso fichó al británico.

Las lesiones se ceban con Bale

Las continuas lesiones le privaron de la continuidad que necesitaba para asentarse en el equipo durante sus primeras cuatro temporadas. Sin embargo, en el curso pasado, una vez dejadas atrás sus dolencias, tampoco dio la cara. Todo lo contrario.

El extremo tuvo varios episodios de mala actitud. Aseguraban algunos de sus compañeros, por ejemplo, que se pasaba demasiado tiempo con el móvil durante las concentraciones, en las que pocas veces se involucró en el grupo.

Bale se deja ir

Gareth Bale ASActitudes que llevaron a Zidane a darle banquetazo, lo que empeoró todavía más la situación. El momento cumbre lo protagonizó en un partido contra el Leganés. El delantero fue suplente y se olvidó las botas de fútbol en el vestuario, debiendo volver a cambiárselas durante el transcurso del encuentro.

Episodios que llevaron al capitán y a algunos de los pesos pesados a mandar un aviso al ‘presi’. Advertencias que crecieron cuando se confirmó la salida de Cristiano Ronaldo. Bale estaba llamado a ser su relevo, pero en el núcleo duro del vestuario no confían en el jugador. Y sus actuaciones tampoco hacen cambiar de opinión. Todo lo contrario. Y es que ni los dos goles en la final de la Champions League contra el Liverpool justifican su mal rendimiento durante todo el año.

Ramos manda un aviso a Florentino

Sin ir más lejos, este miércoles debía ser el jugador que se cargaba el equipo a la espalda cuando las cosas iban mal. CR7 ya no rendía como antes, pero sí es cierto que aparecía en los momentos cruciales y decisivos. Justo lo que no hizo Bale contra el Atlético. “O lo cogen o lo revienta”, aseguran desde el entorno del vestuario, donde afirman que Ramos terminó muy quemado con el pasotismo creciente del extremo con el paso de los minutos.

Gareth Bale supercopa

Como opinan Ramos y compañía, confiar el liderazgo del equipo a Gareth es como pegarse un tiro en el pie. El Madrid necesita otra referencia.

El presidente tiene mucho trabajo por delante en las próximas dos semanas si no quiere empezar la temporada con un equipo a medio hacer y sin un líder nato. Porque por lo que parece, Bale no lo será.