“Quiero irme”. La fuga sonada que Florentino Pérez intenta parar en el Real Madrid

El crack piensa dejar tirado al conjunto de Zidane

Se agotó el tiempo. Lucas Vázquez no quiere que el 2018 sea como el 2017 y uno de los propósitos que se ha propuesto para este nuevo año es convertirse en el crack que hace tiempo promete ser.

El jugador fue uno de los jugadores clave en el proyecto de Zinedine Zidane la temporada pasada, la segunda del extremo en Chamartín.

El gallego fue el futbolista número 12 del míster, el revulsivo del equipo, así como el sustituto habitual de un Gareth Bale que pasó más de media temporada en la enfermería. Además, su aportación a la unidad B fue clave para que el equipo terminara sumando LaLiga y la Champions League.

El delantero esperaba dar este año el paso adelante definitivo, pero nada más lejos de la realidad.

Paso atrás

No solo no está teniendo las titularidades que esperaba, sino que ha visto como jugadores otros jugadores le pasaban por delante a la hora de entrar en el equipo. Y es que no está siendo ni el jugador 12 que fue el año pasado. Lucas solo le sirve a Zizou para los partidos menos trascendentes o para los minutos en los que todo está decidido.

Con todo, sus apariciones no pueden ser más intermitentes, pasando de ser titular a ver el siguiente partido desde la grada, como ocurrió en el último mes del 2017. De los últimos nueve partidos del año, Vázquez fue titular en tres, mientras que en otros tres ni se vistió de corto.

Se quiere ir

Un panorama que ha llevado al extremo a recuperar algunas de las ofertas que le llegaron en verano y que rechazó después de que Zidane le prometiera ser un jugador importante. “Quiero irme”, ha revelado en su círculo cercano.

Una de ellas es de la Roma, donde Monchi le quiere como uno de los líderes del proyecto italiano. Allí sería titular indiscutible y lograría consagrarse como uno de los cracks europeos, algo que no podrá conseguir en Chamartín mientras continúe Zizou y los nombres primen sobre el rendimiento.

Un asunto en el que deberá intervenir Florentino Pérez si no quiere perder a uno de los fichajes que le ayudaron a rejuvenecer y españolizar el equipo, aunque todo apunta que el talonario será el único remedio.