“¿Qué pasa con Modric?”. O la fiesta de la Decimotercera termina en follón

El follón del centrocampista croata en el Real Madrid

La fiesta de celebración de la Decimotercera no acabó precisamente bien. Y es que hubo un jugador que terminó más que molesto con Florentino Pérez. Fue Luka Modric. “¿Qué pasa con Modric?” se preguntaron muchos. Sencillo: se enteró que el presidente tiene en mente quitarle su dorsal para dárselo a uno de los fichajes que más ilusionan al mandatario: Neymar Jr. Y no le hizo ni pizca de gracia.

Lo cierto es no fueron pocos los que daban por muerto al croata en el Santiago Bernabéu. Y no precisamente por su bajo rendimiento, todo lo contrario. Modric ha vuelto a demostrar un año más que su juego es el que hace mover al equipo. Es el dueño y señor del centro del campo, y cuando no está, los blancos sufren, y mucho.

Pero Modric en ningún momento afirmó que se quería ir. Sí que es cierto que desde su entorno se habló (y aún se habla) sobre el tema. Marcharse habiendo ganado la Champions sería la mejor manera de poner punto y final a su etapa vestido de blanco.

De ahí a tener ya su dorsal reservado para el brasileño hay un trecho. Entre otras cosas porque, al menos de momento, no se han sentado a hablar de su fututo. Luka tiene contrato y en caso de marcharse, esperaba que el club tuviese un gesto con él. Pero no que éste no fuera otro que cargarse su famoso ‘10’.

Modric sorprende con una oferta que hace dudar a Florentino Pérez (y a Zidane)  | EFE

El futuro de Luca Modric

Lo cierto es que su futuro no está nada claro. Tiene dudas el crack. Sabe que con casi 33 años no está para muchos trotes. De hecho, Zinedine Zidane ha tenido que reservarlo durante buena parte del año para que llegara al cien por cien a la etapa final de la temporada.

Tiene buenas ofertas encima de la mesa. Entre ellas la de un Tottenham Hotspur que estría más que encantado de recibirlo de vuelta. Pero es consciente que las piernas cansadas serán las mismas en Londres que en Madrid, y la diferencia a la hora de las posibilidades para ampliar su palmarés son más que evidentes.

De momento Modric está centrado ahora en el Mundial. Lo que sí ha dejado claro es que, al margen del cabreo, no piensa ceder su dorsal a nadie. Ni aunque sea Neymar. Se lo ha ganado a pulso.