“O me voy al Barça”. Florentino Pérez tira de la manta (y es un crack del Real Madrid)

El vestuario blanco se pone al rojo vivo por culpa de un crack

División en el vestuario del Real Madrid. Como sigan así las cosas, correrán ríos de sangre en el Santiago Bernabéu.

Aunque el equipo de Zinedine Zidane parece haber recuperado su estabilidad con la victoria sobre el PSG en la Champions, las cosas se han puesto muy feas con dos jugadores.

Uno de ellos es Gareth Bale, señalado y apartado. El extremo galés está más fuera que dentro: hará las maletas el próximo verano rumbo a la Premier League.

Algo distinta es la situación de Isco Alarcón, un futbolista que desde hace años arrastra un aura negativa a su alrededor: la mala fama de traidor.

En las últimas horas, el círculo más cercano a Florentino Pérez destapaba en declaraciones a Diario Gol los secretos más turbios de Isco: su chantaje.

Al parecer, el malagueño amenazó con fichar por el Barça después de cuajar su mejor temporada en el Real Madrid. Explican que fue muy contundente al pedir la renovación al alza.

Puso las cosas muy difíciles. Pedía una cantidad de dinero desmedida”, advierten las fuentes consultadas. Hasta el punto que lanzó la amenaza: “O me pagan, o me voy al Barça”.

Cristiano Ronaldo y Sergio Ramos se imaginan un Real Madrid sin Isco, Bale ni Zidane| EFE

Isco jugaba con la baza de que terminaba contrato en 2018 y habría podido salir libre. Seguramente, hoy se esté dando golpes contra la pared visto que tras renovar ha vuelto a perder protagonismo.

El engaño de Florentino Pérez a Isco

Sin embargo, esta pérdida de oportunidades no es coincidencia: Florentino Pérez se la tiene jurada. El presidente no encajó nada bien la presión del malagueño.

Y no solo por sus elevadas exigencias económicas, donde finalmente el Madrid claudicó, sino porque amenazó con fichar por el FC Barcelona. Eso duele en Chamartín.

Ese gesto, feo, fue el que más molestó a Florentino. Desde entonces, el presidente le tiene puesta la cruz. Ahora Isco cobra un buen salario, pero su carrera deportiva depende de Zidane y Florentino.

El presidente fue más pillo. No amenazó como hizo Isco, pero sí que mintió. Le prometió titularidades y, aunque las ha tenido, su rol en el Madrid va a seguir siendo el de suplente.

Cristiano Ronaldo no puede ni verlo

Así se demostró en la vuelta contra el PSG. Marco Asensio y Lucas Vázquez le pasaron la mano por la cara. Y todo el mundo aplaudió a Zidane.

El objetivo de Florentino era evitar a toda costa que Isco se fuese al Barça. Porque sabía que existía una posibilidad real. Porque conocía el interés de Josep María Bartomeu en ficharlo. Y lo evitó pagando lo que el crack pedía y diciendo lo que quería escuchar.

Isco está en tierra de nadie porque el entrenador está construyendo un sistema donde el malagueño no encaja ni con pegamento. Y varios pesos pesados del Real Madrid están encantados con ello.

Cristiano Ronaldo, el primero. El futbolista portugués también tiene cruzado a Isco, no confía en él. Chantajes como los suyos son los que han frenado que Florentino Pérez le pagase más dinero.

Además, le parece “rastrero” –en palabras empleadas por personas afines a CR7– utilizar al Barça para sacar tajada. Por ello tildan a Isco de “mercenario”.

Es un futbolista de esos que se va con el mejor postor, sin importar el escudo ni el color de la camiseta”, advierten. De hecho, fichó por el Madrid aunque simpatizaba con el Barça.

Ahora, Zidane lo tiene castigado. Y en el vestuario se nota el mal ambiente en torno a él. Sus amigos le apoyan, pero la mayoría están en su contra.

La bronca con Sergio Ramos

Incluso, el propio Sergio Ramos, ha destapado el lado oscuro de Isco: su falta de implicación. Es de aquellos jugadores que si no reciben el trato que creen merecer, en seguida bajan los brazos. «Es la manzana podrida«, señalan. 

Su actitud fue especialmente negativa en el duelo de Liga contra el Espanyol, que perdió el Madrid en el último suspiro. Cuando Zizou lo cambió, abandonó el verde caminando.

Florentino ha decidido que esta historia puede dejar de ser un secreto. Que ya es hora de que la ira del Santiago Bernabéu recaiga sobre Isco.

Y que se sepa su gran mentira: cuando dijo que el Barça le había contactado y no hizo caso, mentía. Estuvo negociando durante meses. Se dejó querer. Pero no quiso pasar a la historia como un traidor.

Buen rollo entre los jugadores de Barça y Real Madrid: Sergio Ramos, Isco, Piqué y Jordi Alba se lo pasan en grande | EFE