Mourinho mete a Pogba en una operación con Florentino Pérez (y no es Gareth Bale. Ni De Gea)
El técnico luso quiere pescar en el Santiago Bernabéu a cambio de un viejo sueño de Zinedine Zidane
“De momento estoy en el Manchester United y pienso en el presente, de verdad”, aseguró Paul Pogba para Canal Plus Football. “No tengo en la cabeza un fichaje”, continuó el francés.
El centrocampista galo quiso desviar la atención sobre su figura y centrar las miras de los aficionados de los red devils sobre la próxima final de la FA Cup que el United jugará ante el Chelsea en Wembley.
Pogba afirmó no tener “ningún problema con Mourinho. Es el entrenador, va a tomar decisiones y yo, como jugador las acepto. Eso es todo”. Y ese, precisamente, es el problema del centrocampista.
El capitán del barco
Mourinho ya le ha sentenciado y quiere beneficiarse de su salida de Old Trafford. Con su traspaso podrá elaborar un equipo más a su medida y en esos planes entra un jugador vital para Zinedine Zidane.
Sumado al interés por Gareth Bale, que el club de Manchester quiere acometer en base a su músculo económico, Mourinho quiere que Pogba sirva como moneda de cambio con la brújula del Real Madrid, Toni Kroos.
El alemán, que fue utilizado por Carlo Ancelotti como pivote de referencia, ha ganado aún más peso junto a Zizou al convertirse en el estructurador del juego blanco. Su papel en el Madrid actual es parecido al de la selección alemana y Kroos está muy a gusto en la capital española, pero no descarta una salida.
Un negocio amistoso
El exjugador del Bayern Munich ya sorprendió cuando se marchó de Alemania y no tendría problema en abandonar el Santiago Bernabéu. De perfil similar a Xabi Alonso, Kroos es un futbolista de mundo que quiere vivir todas las experiencias posibles.
Por esa razón, si el Madrid gana su tercera Champions consecutiva, puede considerar que su ciclo blanco ha acabado y probar suerte en Inglaterra. El United, además, estaría dispuesto a subirle el sueldo considerablemente.
Mourinho cree que puede convencer a Kroos y sabe que el Madrid no vería con malos ojos intercambiar a un futbolista clave que ha amortizado extraordinariamente la inversión hecha por él.
Zidane, además, sabe que debe revolucionar el equipo o sucumbir al agotamiento de su ciclo, y Pogba encajaría perfectamente en la medular blanca por su llegada y despliegue físico. Si todos mueven bien sus cartas, United y Madrid pueden hacer un cambio de cromos que deje a todos contentos.
