“Me voy con Cristiano Ronaldo”. Y es del Real Madrid (o puñalada final a Florentino Pérez)
El portugués recluta para la Juventus a un peso pesado del club blanco
Cristiano Ronaldo sigue provocando muchos dolores de cabeza en el Real Madrid. La salida del delantero luso sigue haciendo mucho daño. Y no tanto porque en el vestuario le echen de menos (que no es así), sino porque los continuos mensajes en contra del club por parte de Cristiano no están sentando nada bien.
Esas alusiones constantes a que la Juventus es una “familia” y que en Turín están mucho más unidos que en Valdebebas no gustan en el seno del club. Tanto es así que, cuentan, a día de hoy el único jugador merengue con el que sigue manteniendo contacto CR7 es Marcelo.
Los Sergio Ramos, Modric, Kroos y Casemiro, con los que hasta no hace mucho el delantero se llevaba más que bien, han desaparecido del mapa. Nadie quiere saber nada del portugués. De hecho, los únicos que echan de menos al de Madeira son los aficionados, que añoran sus goles y su rendimiento en el campo.
La puñalada final de Cristiano a Florentino
No así Florentino, que encima está viendo como Ronaldo sigue intentando torpedear a su equipo desde Italia. En esta ocasión el plan pasa por ir a por una de las piezas claves del once del Real: Marcelo.
El lateral brasileño siempre ha sido un jugador ciertamente discutido en el Bernabéu. Nadie duda de su calidad y de su vocación ofensiva, pero su pasividad en defensa le ha costado más de un disgusto al madridismo.
Pero a Ronaldo siempre le ha gustado el carioca, y quiere llevárselo a la Juventus. Algo que cuadra con los planes de Marcelo, que sabe que está en el momento de encontrar un último gran contrato.
Marcelo, de camino a la Juventus
De ahí que ya vaya diciendo entre los suyos: “Me voy con Cristiano Ronaldo”. Una puñalada a Florentino. Y no tanto porque se marche, sino porque lo haga al equipo donde está el luso.
Ya le va bien a Pérez que Marcelo desaparezca. Es uno de los nombres marcados en rojo como posibles ventas de cara al próximo verano. Lo que no quiere ni imaginarse el presidente del Madrid es ver como el carioca llega a Turín y empieza a ganar títulos.
