Marco Asensio no le habla. Isco no lo traga. Y Sergio Ramos no lo puede ni ver

El crack del Real Madrid que cava su tumba entre los pesos pesados

Vinícius Jr no tuvo ni un minuto ante el Huesca. El brasileño se pasó en el banquillo todo el encuentro. Santiago Solari decidió darle descanso tras haber jugado 78 minutos contra el Melilla en la vuelta de los dieciseisavos de la Copa del Rey, donde marcó un gol y regaló una asistencia.

Pero la opinión sobre la actuación del carioca no es del todo positiva. Ni entre los aficionados ni en el seno del equipo. Y es que el gol y la asistencia fueron los únicos detalles destacables del partido del brasileño.

Vinícius, fuegos artificiales y poco más

Vinícius se perdió en filigranas que no llevaban a ningún lado y que en la mayoría de ocasiones terminaron en pérdidas absurdas de balón. Acciones que sacaron de quicio a muchos de sus compañeros. De hecho, cuando las hacía Neymar siempre eran criticadas.

Pero mucho más molestó a los jugadores el bailecito que dedicó a la grada cuando vio portería. Era el Melilla, un rival mucho menor, y la eliminatoria ya estaba sentenciada. No había lugar para celebraciones como si hubiera sido un gol en la final de la Champions League.

Vinicius baile 1Vinicius baile 2Vinicius jr baile 3

Y es que tampoco fueron de recibo las reverencias que le dedicó al Santiago Bernabéu cuando anotó su primer gol con la camiseta del Real Madrid contra el Valladolid. Y es que su chute ni siquiera iba entre palos. ¡Se iba fuera de banda!

Y es que estos airecitos de grandeza en partidos menores no gustan un pelo entre los pesos más pesados.

Vinícius se gana enemigos en el Real Madrid

Mosquean a Sergio Ramos, que considera que se necesita demostrar mucho más para poder presumir con la camiseta blanca. Mosquean también a Asensio y a Isco, a los que está quitando minutos.

Y mosquea incluso hasta a Gareth Bale, que nunca se mostró tan soberbio sobre el terreno de juego. El galés pecará de muchas cosas, pero no de ir de sobrado sobre el césped. Todos ellos consideran que hace falta demostrar mucho más para tomarse ciertas licencias. Opinan que una cura de humildad no le iría nada mal.

El delantero sabe que cuenta con el apoyo de Florentino Pérez y que mientras esté Solari estará a salvo. Pero bien haría de no ganarse muchos enemigos, pues el argentino saltará más pronto que tarde. Y para entonces podría quedarse sin aliados en el vestuario.