Keylor Navas alucina con la pasta que Kepa le saca a Florentino Pérez

El costarricense se queda sin palabras

Está al caer. Kepa Arrizabalaga aterrizará con casi toda seguridad en el Aeropuerto Adolfo Suárez muy pronto.

El portero del Athletic Club ha sido uno de los culebrones de las últimas semanas. En San Mamés se encontraron con que el portero, que termina contrato en junio del 2018, se consagraba como uno de los cancerberos que apuntan a ser uno de los mejores del mundo.

Los vascos intentaron reaccionar y renovarlo con tal de sacar una buena tajada en el futuro, pero ya era tarde. Florentino Pérez y el Real Madrid ya habían seducido al meta.

Tentación blanca

Las primeras intenciones pasaban por incorporarlo en el próximo mercado estival, cuando Kepa tuviera la carta de libertad bajo el brazo.

Pero después de varios tiras y afloja, intentona de renovación por parte de los leones por el medio, todo apunta a que la operación se cerrará en los próximos días, previo pago del Madrid de unos 20 millones de euros.

Asimismo, en el entorno blanco se habla de que desde Chamartín le habrían ofrecido al futbolista una ficha fija anual de cuatro ‘kilos’ más unas variables que podrían alcanzar los seis millones de euros.

Una cifra muy lejana de los tres como máximo que estaban dispuestos a soltar en Bilbao, y que no solo deja sin capacidad de reacción a los vascos, sino que tiene a Keylor Navas sin palabras.

Keylor alucina

Cuatro millones es justo lo que cobra el costarricense. Una cantidad que no llegó a ganar hasta que cumplió sus dos primeras temporadas en el Madrid, en las

El costarricense empezó cobrando dos millones de euros cuando llegó procedente del Levante, cuando ya era un portero contrastado, y no llegó a ganar cuatro hasta que no pasaron dos temporadas y se convirtió en el portero titular.

El tico alucina con el contrato que ha logrado sacarle Arrizabalaga a Florentino, un cancerbero que todavía es un melón por abrir y que, al margen de unas pocas buenas actuaciones con el Athletic y con la Rojita, todavía no ha demostrado nada.