Neymar puede dejar una herida abierta de difícil cicatrización para los aficionados culés. El Barça, además de poner la tirita, quiere aprovechar para hacer daño a su eterno rival.
La renovación de Isco Alarcón con el Real Madrid sigue en punto muerto y algunos miembros de la directiva del Barça vuelven a llamar a la puerta del media punta madridista.
La oferta azulgrana no difiere de lo hablado anteriormente. Tendrá una ficha millonaria si aguanta sin renovar un año y la titularidad garantizada. La sorpresa viene con la última propuesta.
Si Isco dice públicamente que quiere jugar en el Barça y presiona para salir, el club pagará por el malagueño.
La clausula anti-Barça
El precio de Isco rondaría los 60 millones de euros, pero su contrato incluye una clausula anti-Barça que comportaría una penalización económica no revelada.
El coste de la penalización puede ser muy similar a la prima de fichaje que Isco recibiría por dejar expirar su contrato, pero los culés prefieren que Isco aguante una temporada más en el conjunto blanco.
Realizar el fichaje ahora supondría declarar una guerra pública a Florentino Pérez. Y pee a que la venta de Neymar dejaría al Barça en una buena posición económica, la directiva no quiere entrar en una pelea de gallos con el magnate blanco.
Isco sigue sin dejar claro su futuro a corto plazo. Los partidos de pretemporada hacen indicar que será importante a lo largo del año pero la llegada de Mbappé puede dejarle fuera del once. Es año de Mundial y quiere sentirse titular indiscutible.
