Florentino Pérez pacta un cambio de cromos en el PSG-Real Madrid (y el fichaje no es de Zidane)

El presidente blanco construye el Madrid del futuro en el Parque de los Príncipes

Lamentable. El partido que cuajó el París Saint-Germain para tratar de remontar la eliminatoria de octavos de final de la Champions League fue vergonzoso.

Los de Unai Emery no propusieron nada. Salieron al césped con miedo, eclipsados por el bochornoso espectáculo que protagonizaron los ultras galos con sus bengalas, y cayeron jugando muy mal (1-2).

El Real Madrid de Zinedine Zidane cuajó un partido tan discreto cuanto eficiente. Con mucho oficio, los blancos hicieron bueno el 3-1 cosechado en el Bernabéu.

Cristiano Ronaldo (’51) y Casemiro de rebote (’80) brindaron otra victoria al Madrid para dejar reflejado en el luminoso un sonrojante 5-2 en el global de la eliminatoria. El único gol del PSG fue de Cavani, también de rebote (’71). 

Con Marco Asensio, Lucas Vázquez y Mateo Kovacic como titulares, los nervios estaban a flor de piel antes del choque. Modric, Kroos, Isco y Bale se quedaron en el banquillo.

Emery, por su parte, apostó por Ángel di María en lugar del lesionado Neymar. Pero poco aportó el Fideo. Cómo Cavani y Mbappé, que tampoco aparecieron.

Peor fue la actuación de Marco Verratti, ese centrocampista que trató de fichar el Barça en verano y que, tras la fuga de Neymar, decidió seguir en París. Este martes fue expulsado por doble amarilla, dejando vendido a su equipo en una acción de cadete.

Florentino Pérez se frotó las manos. El presidente blanco aprovechó para hacer movimientos en el Parque de los Príncipes. El trabajo de palcos que tanto gusta al empresario siempre deja frutos.

Es conocida la buena relación de Florentino con el presidente del PSG, Nasser Al Khelaifi. Al punto que a menudo hablan de fichajes. Mejor de eso que de fútbol.

Modric e Isco, los más deseados

Ambos tienen algo en común: son enemigos del Barça. El Madrid por su rivalidad histórica y el PSG por los conflictos que el club catalán tuvo con Qatar y por el ‘robo’ de Neymar.

Esa rivalidad con el Barça ha reforzado los lazos entre Madrid y PSG. Y en Qatar están encantados con esa nueva amistad con el equipo más laureado de Europa.

En Saint Dennis, los blancos demostraron ser todavía muy superiores al cuadro parisino, que lleva muchos años cayendo en octavos, máximo cuartos, de final de la Champions.

Por ello, Al Khelaifi sigue empeñado en construir el equipo más competitivo posible. Y si hay que negociar con el Madrid, están dispuestos.

Draxler, petición de Low

Uno de los objetivos que tiene el presidente del PSG es Luka Modric, un futbolista de 33 años que encara la recta final de su carrera. Florentino está dispuesto a venderlo si pagan bien.

Otro jugador que entusiasma tampoco jugó en el Stade de France. Se trata de Isco Alarcón, al que Florentino propone para un cambio de cromos con Neymar. Obviamente, sumando una buena suma de dinero: en torno a 150 millones de euros.

Los otros jugadores por los que preguntó Florentino son Draxler y Gonçalo Guedes. Futbolistas de gran nivel que servirían para añadir competencia a la imponente plantilla blanca.

Precisamente Draxler es un crack que encaja en el proyecto del posible relevo de Zidane en el banquillo blanco. Si el galo se va, llegará Joachim Low, que confía en el extremo alemán.