Florentino Pérez negocia con el Milan la operación sorpresa del año en el Real Madrid

Florentino Pérez tiene muy claro que, tal y como ha ido haciendo en los últimos veranos, el Real Madrid no va a ir a por fichajes galácticos. De hecho, el único nombre que sí que puede hacer que el club blanco opte por hacer una locura es el de Kylian Mbappé. Pero, como bien saben en el Bernabéu, el PSG le ha cerrado la puerta.

Florentino tiene ahora la excusa (y los números) para seguir apostando por una política que le ha dado buenos frutos en los últimos años. Y esa no es otra que la de ir a por talento joven para el Madrid.

No precisamente para el filial, sino para el primer equipo. Jugadores como Vinícius, Fede Valverde o Rodrygo son un ejemplo de ello. El presidente parece que ha dejado atrás la época en la que, a golpe de talonario, se llevaba a grandes estrellas ya más que formadas para hacer un Madrid galáctico.

La operación sorpresa con el Milan

En este sentido, son varios lo nombres que Florentino tiene encima de la mesa. El trabajo de la secretaría técnica blanca está centrado en, entre otras cosas, encontrar un relevo de garantías y, sobre todo, de mucho futuro, para Casemiro.

Y es que no ha sido otro que el propio Zidane el que le ha dejado muy claro a la directiva que el brasileño necesita descanso. Por mucho que Casemiro sea un pulmón, Zinedine sabe muy bien que el carioca no puede aguantar el ritmo cada vez más alto de su equipo.

Si bien es cierto que a Zidane le encantaría poder ir a por Kanté, su opción principal, sabe muy bien que Florentino no está por la labor de empezar una dura negociación con un Chelsea que no dejaría salir al francés sin un cheque cuantioso por delante. De ahí que Zizou y Pérez busquen alternativas. Y una de ellas están en el Milan.

La nueva joya del Milan

No es otro que el pivote francés de origen argelino Ismaël Bennacer. El centrocampista llegó al Milan el pasado verano procedente del Empoli y en su primera temporada ya se ha ganado la admiración de muchos en la Lombardía.

Si bien es cierto que no es un jugador que imponga (mide 1.75m), su juego defensivo es brillante. Y eso es lo que busca Zidane. De hecho, por tamaño y características, es mucho más Kanté que Casemiro.

Desde Italia apuntan que el presidente de Madrid ya ha preguntado por él. La respuesta del Milan no ha sido del todo negativa, pero Florentino sabe que deberá pagar unos 30 millones de euros para poder sacarlo del conjunto italiano.

Si bien es cierto que su valor de mercado ronda los 17 millones de euros según el portal especializado Transfermarket, el Madrid sabe muy bien que todos los clubes siempre acaban subiendo el precios de sus jugadores teniendo en cuenta que su destino es el Bernabéu.

De momento las negociaciones siguen en marcha. La directiva blanca, eso sí, no ha dado el paso definitvo. Entre otras cosas porque antes quieren saber las intenciones reales de otra de las promesas que ilusionan a Zidane y que, de hecho, es el plan A del Madrid: Eduardo Camavinga.

El problema con el galo es que el Rennes ya le ha hecho saber al Madrid que su precio se enfilará por encima de los 50 millones de euros, una barrera que Florentino no está dispuesto a saltar. La idea de ir a por talento joven es que tenga un precio asequible. Camavinga, de momento, no parece barato. Bennacer sí. Veremos si el del Milan acaba convirtiéndose en la sorpresa del año.