Escándalo Isco: “60 millones”. Florentino Pérez no calla más. Sergio Ramos estalla (y hasta Dani Ceballos alucina en el Betis-Real Madrid)

Los de Santiago Solari se llevan la victoria por la mínima (1-2) ante los andaluces

El Real Madrid ha conseguio llevarse los tres puntos en su visita al Benito Villamarín tras ganar 1-2 al Betis.  Sin embargo, la noticia saltó, una vez más, antes del encuentro. Y es que de nuevo Santiago Solari dejó a Isco Alarcón en el banquillo. Por mucho que se haya vuelto una costumbre, no deja de sorprender que el argentino no cuente con el andaluz.

Especialmente en partidos como el de hoy. Y es que, con las bajas de Toni Kroos, Gareth Bale, Lucas Vázquez y Marco Asensio, algunos apuntaban a que Solari metería a Isco en el once sí o sí. Pues no. Pero lo pero fue cuando, a medida que iba avanzando el partido Solari optó por dar entrada a Dani Ceballos, que acabó marcando el gol de la victoria, Brahim Díaz e incluso a Cristo González tras la lesión de Karim Benzema. Todo con tal de que Isco ni calentara.

Solari | EFE

El argentino ha dejado más que claro que no quiere saber nada del crack español. De hecho, ya durante los primeros días al mando del primer equipo ya intuyó que su relación con Alarcón no iba a ser precisamente la mejor.

Algo que se confirmó tras las primeras suplencias y los desplantes del español. Cuentan que Isco le negó el saludo en alguna que otra ocasión, que raja por su espalda y, lo que es peor para el Real, que no da el cayo en los entrenos. Los rumores sobre si está o no en forma han vuelto coincidiendo con su bajón deportivo.

Sergio Ramos estalla

Pero el problema de Alarcón no se centra tan sólo en la figura de Solari. Y es que jugadores como Sergio Ramos, Modric, Benzema o incluso Marco Asensio ya no le apoyan. Es más, un recién llegado como Vinícius aún no se cree lo que está viendo con Isco.

Isco Alarcón | EFE

Cuando empezó el lío salieron en su defensa, pero viendo que la actitud del centrocampista está muy lejos de ser la de querer recuperar su galones, el capitán y los pesados han dado un paso al lado y se han desmarcado de su particular guerra.

Un vestuario en el que, de hecho, Isco siempre ha tenido, como apuntaron desde el entorno del club hace ya tiempo, fama de “traidor”. Sin embargo, Ramos ha dejado claro que, por mucho que Isco esté sentenciado, en partidos como hoy con tantas bajas, debía jugar. Va antes el club que las disputas entre ellos.

De ahí su enfado. Que juegue Fede Valverde o Reguilón antes que Isco es, cuanto menos un escándalo. El capitán prioriza las victorias y el buen juego, y sabe que este cruzada entre Solari e Isco no hace otra cosa que perjudicar a todos.

Pero más allá de sus problemas con Solari, Ramos y el resto de primeras espadas, el ‘caso Isco’ está poniendo de los nervios también a la directiva.

Florentino Pérez no calla más

Y es que toda esta situación está teniendo unos daños colaterales muy importantes para el presidente. Nadie esconde en el Bernabéu que lo mejor para todos es que el andaluz haga las maletas una vez acabe el año.

Florentino ya tiene asumido que debe venderlo. El problema es que sus suplencias, sus líos en el vestuario, los rumores sobre si está o no gordo, incluso sus encontronazos con la grada del Bernabéu han hecho que su caché caiga en picado.

60 millones”. Esa es la cifra que comentan desde dentro. Una cifra que corresponde a la diferencia entre los que pudieron pedir por él el último verano (120 millones) y las ofertas que están llegando ahora al feudo blanco por él. Y Florentino ya no se calla más. El toque de atención a Solari está al caer. Las disputas personales se dejan fuera del día a día del equipo. Y Isco, le guste o no al argentino, no deja de ser una de las piezas caves de este Real.

Isco Alarcón | EFE

Cada vez peor

Y es que nadie está dispuesto a pagar más de 60 millones y variables por un jugador que está en el banquillo de forma perenne. Grandes equipos como el Manchester City o el Chelsea, que tiene a Alarcón en la agenda, ya han dejado claro que harán una oferta a la baja.

Pero, como apuntan desde dentro, si el lío continúa, aún puede ser peor. Florentino está de los nervios viendo como esta disputa entre el centrocampista y el técnico está perjudicando a todos. Ramos está harto de ‘inventos’ del argentino e Isco, encima, ya avisa que está dispuesto a poner el club patas arriba con tal de salir y conseguir una buena ficha tras una venta a la baja.

Y, mientras todo eso ocurre, el Real sigue dando una imagen de equipo pequeño y lejos de poder luchar por nada. Ojo que la cosa se está poniendo muy fea.