El jugador del Real Madrid que planta a Zidane en un cara a cara con Florentino Pérez

El futbolista estalla con el presidente

No entra en sus planes. Marcos Llorente está condenado a ver los partidos desde la grada. El futbolista tiene números contados con los dedos de la mano para tener alguna oportunidad en el Real Madrid de Zinedine Zidane.

El míster no lo pudo dejar más claro en el partido que los blancos disputaron ante el Valencia antes del parón por los compromisos internacionales.

Sergio Ramos no estaba por sanción, mientras que Raphaël Varanne se ausentó por molestias. Con este panorama, todo apuntaba a que Llorente entraría de titular en el centro de la defensa junto a Nacho Fernández y mover así el menor número de piezas posible.

Mensaje a Llorente

Pero el míster prefirió poner a Casemiro en la zaga, retrasar a Toni Kroos y poner a Isco en el sitio del germano. Asimismo, Zidane prefirió montar un rompecabezas antes que dar minutos a Marcos.

El canterano captó el mensaje. Sabe que con Zizou no tendrá minutos y hace días que trasladó a los directivos su deseo de salir del Madrid. En la cúpula, no obstante, no querían perderlo de vista y decidieron, al menos de momento, no dejarlo salir.

No aguanta más

Pero el jugador y su entorno insisten a Florentino Pérez. Llorente exigirá que, si las cosas no cambian en las próximas semanas, le dejen salir en el mercado invernal. El futbolista no dejó el Alavés, donde gozaba de la titularidad indiscutible, para ver pasar las temporadas desde el banquillo del Santiago Bernabéu.

Y difícilmente cambiarán, pues el problema entre el jugador y el míster no es nuevo ni nada que pueda solucionarse en unos pocos días.

Todo se remonta a cuando el francés entrenaba al Real Madrid Castilla. Entonces, Marcos y otros miembros de la plantilla, se rebelaron contra el francés por los privilegios que le concedía a su hijo, Enzo Zidane, al que incluso le otorgó la capitanía en contra de la opinión del grueso del equipo. Una decisión que, además, desestabilizó a un equipo que terminó diluyéndose.