El casting de Florentino Pérez para cargarse a Zidane tiene un ganador

A punto de caramelo. Florentino Pérez mueve ficha en el Real Madrid. Al presidente blanco se lo llevaban los demonios en el palco del Santiago Bernabéu tras firmar el Real el enésimo ridículo de la temporada. El máximo mandatario del club blanco bajó el pulgar a los Benzema, Kovacic, Marcelo y compañía, pero la palma se la llevó Zidane.

Un enfado monumental

‘Flo’ llevaba, y lleva, un mosqueo de mil demonios por la alineación del galo al que responsabiliza del desaguisado, no sólo en el Clásico, sino en un curso en el que el Madrid transita peligrosamente por el precipicio.

A Pérez no le gustó un pelo que ‘Zizou’ dejara fuera el once a Isco, que no arriesgara con Marco Asensio o no pusiera a uno de sus ‘niños bonitos’, Gareth Bale, de inicio.

Ya tiene recambios

La paciencia de Florentino con Zidane, avisan desde el Santiago Bernabéu, tiene fecha de caducidad: si el equipo no se lleva nada grande al gaznate antes de verano, es decir, firma un año en blanco en los tres grandes títulos en juego –Copa, Liga y Champions-, Zinedine, que está perdiendo el favor de varios de los pesos pesados del Real a pasos agigantados, será fulminado. ¿El sustituto? Joachim Löw.

El alemán va como loco por volver a los banquillos de un grande una vez pase el Mundial de Rusia en el que dirigirá al combinado germano. Löw tiene enamorado a Pérez. El presidente cree que no hay nadie mejor para marcar el futuro post-Zidane en el Madrid. Las conversaciones entre las partes son una realidad con Conte (Chelsea) –‘plan b’- en la recámara.