Cristiano Ronaldo esperó a Messi en el vestuario del Barça: ¡Ojo al recadito!

El luso no pudo contener su indignación

Indignado. Cristiano Ronaldo no daba crédito a su expulsión en la ida de la Supercopa de España ante el FC Barcelona (1-3). Solo el colegiado vio que el luso intentaba simular un penalti en el forcejeo con Samuel Umtiti. Ni los jugadores del Barça podían creerse lo que estaba pasando.

De ahí la reacción de impotencia del portugués y también la conversación que tuvo con algunos jugadores culés en el interior del túnel de vestuarios. El luso y otros pesos pesados blancos no se pudieron contener y dejaron las cosas claras a los culés.

Están hartos

Las ayudas de De Burgos Bengoetxea hicieron estallar al conjunto de Zinedine Zidane. Los merengues empiezan a pensar que no es casualidad que el Real se haya quedado con diez hombres en cuatro de los últimos cinco partidos.

La expulsión de CR7 era injusta, mientras que el penalti señalado sobre Luis Suárez fue uno de los mayores engaños de la historia del fútbol.

En este sentido, el uruguayo se ha ganado la enemistad de muchos jugadores del vestuario blanco. Los madridistas ya saben qué pie calza y que la deportividad no entra en sus planes cuando entra en un terreno de juego.

Ojo a lo que viene

Pero ese no fue el único mensaje que Cristiano quiso dejar a los catalanes. El luso avisa al Barça: por este camino el Barça no se clasificará ni para la Champions League. Y a Messi: si nada cambia, Leo ya ha ganado todo lo que tenía que ganar en la ciudad condal.

En el Camp Nou pueden tener al crack argentino, pero quedó demostrado que sin ayudas arbitrales no hay Messi que valga.

Los guiños de los colegiados no tapan el rumbo a la deriva y sin freno que lleva el club blaugrana. Ésta no es la forma de ganar de un equipo campeón. Y los favores no serán eternos.