Cristiano Ronaldo desatado: “No lo quiero” (y es para el Real Madrid-Liverpool. Y hay sorpresa)

El portugués manda una advertencia para la final de la Champions League

Punto y final. El Real Madrid cerró su participación en la Liga esta temporada con un empate contra el Villarreal (2-2), en el último compromiso de los blancos en la competición de la regularidad. Un resultado intrascendente y que deja muchas dudas de cara a la final de la Champions League contra el Liverpool que los merengues disputan en Kiev la semana que viene. No obstante, también muchos confían en que el toque de atención haya llegado a tiempo.

En la primera parte se vio al mejor Madrid.  Desde el minuto 1 los de Zinedine Zidane salieron a llevarse el encuentro. Salvo la sorpresa de la titularidad de Luca Zidane en la portería –el hijo del técnico jugó su primer partido oficial con el primer equipo-, el míster dispuso un once que bien podría ser titular en Kiev.

Será la tercera consecutiva que juegue el Madrid, la cuarta en cinco años y la oportunidad de ganar la Decimotercera y este sábado se metieron en el papel en el choque disputado en El Madrigal. Al menos en laprimera parte.

Gareth Bale abre la lata, pero nada más

Gareth Bale así lo confirmó en el minuto 10, cuando anotó el primer tanto de la noche. Un gol que confirmaba que el Real estaba realizando su último ensayo antes de la finalísima. Pero había algo que no funcionaba.

Gareth Bale villarreal

El Madrid dominaba y de qué manera, pero la superioridad blanca se quedaba en el centro del campo. Los de Zizou estuvieron inoperantes en el ataque durante buena parte del encuentro.

Cristiano Ronaldo se queda solo

Cristiano Ronaldo es el único al que se le vio, pero estuvo muy solo. Isco Alarcón y Gareth Bale apenas le dieron apoyo que necesitó en las jugadas de ataque. Y el luso no puede con todo.

De hecho, el finalista de la Champions no volvió a aparecer en ataque hasta que en el 32’ Marcelo se sumó a la vanguardia y regaló un centro medido a CR7, que remató a la red el segundo tanto con el que el equipo se fue al descanso.

El Real Madrid tira el enésimo partido de la temporada

En la segunda los de ZZ quitaron el pie del acelerador y la imagen de los madridistas cambió drásticamente. El  Villarreal fue el que dominó el encuentro. Los locales cogieron el relevo a los de la capital.

Zidane dio entrada a Karim Benzema y a Lucas Vázquez en sustitución de Luka Modric y Cristiano Ronaldo, necesitados de descanso, pero el partido no cogió otro aire. Todo lo contrario. Fue a peor. Sin Cristiano en el campo el Real no completó ninguna jugada en ataque y el Villarreal se fue viniendo arriba hasta que Roger Martínez anotó el primer tanto de los locales en el 70’. A cinco minutos del final era Samu Castillejo el que anotaba para empatar el choque.

Pero la noticia no estuvo sobre el terreno de juego, sino en los vestuarios. Allí avisó Cristiano cuando fue sustituido. “No lo quiero”.  Y la advertencia no es nueva.

Cristiano Ronaldo solo quiere cabezas comprometidas

El de Madeira sabe lo que hay en juego en Kiev. A nivel colectivo, marcar un antes y un después en la historia del fútbol con el triplete de Champions. A nivel individual,  sumar el quinto Balón de Oro e igualar a Leo Messi, y adjudicarse el tercer The Best.  Asimismo, sumaría ambos galardones por tercera vez consecutiva, algo que probablemente nadie jamás conseguirá.

Por eso quiere a los mejores en el campo. A los más sacrificados. Lograr los ansiados objetivos pasan por brillar contra los reds, y para ello necesita a los más comprometidos sobe el terreno de juego.

Un grupo en el que no están un Isco y un Bale que están más pendiente de si seguirán en el Real que de los logros madridistas. A los que no importan tanto los éxitos blancos como el equipo en el que jugará el año que viene.

Cristiano Ronaldo Villarreal isco

Prefiere a Benzema, Lucas o Asensio

Sí en cambio quiere a un Benzema que hará lo posible para que su protector, Zidane, sume la tercera Liga de Campeones, aunque ello pase por entregarse a CR7.

También prefiere a un Lucas Vázquez o a un Marco Asensio que estén dispuestos a realizar el trabajo sucio y que otros brillen con tal de formar parte del Madrid más grande de la historia.

Sí es cierto que en El Madrigal los dos primeros no aportaron lo que necesitó el Madrid en el ataque, pero también lo es que no tenían a Cristiano como referencia. Algo de lo que sí disfrutaron Isco y Bale gran parte del partido y no supieron aprovechar.