Cristiano Ronaldo deja tres muertos en el Real Madrid-PSG (y el recadito a Messi en caliente)

El equipo de Zinedine Zidane se impone al conjunto parisino en un partido sorprendente

Duelo de titanes en el Santiago Bernabéu. Era el partido más esperado del año y no decepcionó. Ni a los aficionados al fútbol en general, ni a los del Real Madrid, que vivieron una noche de contradicciones: jugaron mal fútbol pero lograron una remontada épica contra el PSG (3-1).

Los pupilos de Zinedine Zidane saltaron con todo al césped. Plantaron una línea de presión muy alta, asfixiante contra el PSG. Sirvió para pegar algún pequeño susto. Duró cinco minutos.

Los de Unai Emery se repusieron en seguida. Equilibraron el partido y empezaron a generar ocasiones cada vez más claras. Las vergüenzas del Madrid empezaban a aflorar.

Neymar lo intentaba, pero sobresalía su peor versión: una patada a Nacho innecesaria que le costó la cartulina amarilla. Fuera de lugar, demostró estar muy lejos de su admirado Leo Messi.

Por el Madrid, Cristiano Ronaldo hacía amago de aparecer. Sin éxito. Y Benzema ni siquiera eso. Solo Isco aportaba regates vistosos, aunque escasamente efectivos.

El bueno demostró ser otro: Kylian Mbappé. El delantero francés se puso el mono de trabajo para defender. Recuperó balones y regateó, dio salida al balón y demostró una inaudita polivalencia en el primer tiempo. En la segunda mitad se diluyó, como su equipo.

Antes apareció el oportunista. Tocado por una varita mágica, Rabiot aprovechó un balón muerto anticipándose a Modric e Isco para reventar la portería de Keylor Navas.

El Bernabéu se inundaba de tristeza. Y con razón. Sin nada, el PSG se ponía por delante en el luminoso. Y recordaba lo mal que está el Madrid. Ni con su mejor actitud hacen daño a un equipo mínimamente serio (tampoco tanto como se esperaba).

Emery se permitió el lujo de jugar con un jovencísimo centro del campo –Lo Celso (21), Rabiot (22) y Verratti (25)–, sin pivote defensivo claro y con dos centrales igualmente jóvenes. Pero el planteamiento le acabó costando caro.

80 minutos decepcionantes

El capitán, Thiago Silva (33), se quedó en el banquillo para que Marquinhos (23) luciese el brazalete junto a Kimpembe (22). Y aguantaron al Madrid sin sobresaltos durante la mayor parte del duelo.

El gol del empate para el Madrid llegó de penalti. Justo antes del descanso. Una pena máxima más que discutible que transformó un Cristiano Ronaldo que sigue siendo efectivo desde los 11 metros.

Los blancos, totalmente estériles, iban tras el balón de un PSG que se dedicó a defender el resultado. Emery quitó a Cavani para reforzar el lateral derecho y avanzó a Dani Alves.

El cambio previo de Zidane consistió en poner a Bale por el fantasma Benzema. El galo fue el principal objeto de las críticas de la hinchada blanca. No hizo nada.

La reacción milagrosa del Real Madrid

El tiempo pasaba y el Madrid iba muriendo en su propia agonía. No proponía nada. Hasta que Zidane tiró del clan español. Los jóvenes Marco Asensio y Lucas salieron al rescate.

Sin Isco sobre el césped, el Madrid ganó en velocidad. Cristiano parecía pedir a gritos la presencia de Asensio, que le dio la asistencia del gol. Al salir del túnel de vestuarios en el descanso ya se mostraron muy cariñosos, todo el tiempo juntos.

Zidane lo vio. Le dio entrada y el chaval respondió. Su cabalgada por banda izquierda desembocó en el segundo gol de Cristiano (’83). Y solo tres minutos después, con el PSG noqueado, llegó el tanto de Marcelo para encarrilar la eliminatoria (’86).

Cristiano Ronaldo terminó el partido eufórico y volvió a demostrar que su nombre se impone en las grandes citas. Hasta el punto que dejó a tres personas heridas de muerte.

Los tres muertos de Cristiano Ronaldo

El primer muerto, y que peor huele, es Isco Alarcón. Una vez más, el Madrid fue insolvente con el malagueño. Mucha magia pero muy poco peligro. Ralentiza el juego.

El segundo es Neymar. Cuando todo el mundo dice que es mucho mejor que Cristiano Ronaldo, que será el gran fichaje del Madrid y que es el hombre de los 222 millones de euros justificados, resulta que no es capaz de hacer nada en el Bernabéu. Muy flojo.

El tercer muerto es Florentino Pérez. El presidente del Madrid se ha negado a renovar a Cristiano Ronaldo todo lo que ha podido. Ha tensado la cuerda pensando en venderlo el próximo verano. Y, una vez más, se lo va a tener que comer. Es el triunfador.

El palo a Messi

También Leo Messi sale salpicado con este resultado. Cristiano Ronaldo vuelve a sumar posiciones en su lucha individual allanando el camino a la 13ª. Si los blancos la consiguen, CR7 volverá a ser claro candidato al Balón de Oro y The Best. No importa cuánto mejor juegue Messi.