Coutinho se entera de que dos jugadores del Real Madrid llegan a las manos

El brasileño revela una bronca bestial en el conjunto de Zinedine Zidane

El empate del Real Madrid en su visita al Levante (2-2) no pasó desapercibido en el FC Barcelona.

En el Barça alucinan con el Real Madrid

Los jugadores culés alucinan con la trayectoria del conjunto blanco esta temporada. Los futbolistas blaugrana no se creen que los que empataron en el Ciutat de València sean los mismos que les barrieron en la Supercopa de España.

Tanto es así que incluso es uno de los temas de conversación entre los cracks de uno y otro vestuario. Las confidencias entre Ivan Rakitic y Luka Modric, Marco Asensio, Lucas Vázquez y Dani Ceballos con Denis Suárez o Gerar Deulofeu –cuando el Riudarenes aún estaba en el club- o entre Gerard Piqué y Sergio Ramos son constantes.

También entre los brasileños del Barça Phillippe Coutinho y Paulinho y los del Madrid, Marcelo y Casemiro. Y anoche no fue menos.

Precisamente el lateral carioca le reveló a Coutinho que anoche tuvo que intervenir en el vestuario madridista después del partido para evitar que las broncas entre varios futbolistas se fueran de madre.

Isco y Benzema suben el tono

Concretamente se refirió a la discusión que mantuvieron Isco Alarcón y Karim  Benzema, que se recriminaron un sinfín de acciones del partido contra los granota. El francés le exigió a Alarcón no ser tan individualista y mirar más a sus compañeros.

Una acusación ante la que el andaluz fue claro. Isco le señaló que si lo es, es para anotar todas las ocasiones que el galo pierde.

En este sentido, el de Benalmádena le echó en cara al francés la cantidad de oportunidades desperdiciadas por su mala forma y su mala colocación sobre el terreno de juego, mientras el francés se excusaba señalando a Cristiano Ronaldo, del que dice que ocupa su posición en el terreno de juego convirtiéndose en un estorbo.

Todo ello con un Marcelo que se interpuso entre ambos, cortando una discusión que no hace más que perjudicar al equipo y agravar la crisis que atraviesa el vestuario blanco.