Benzema dinamita un fichaje de Florentino Pérez con un “no quiero ir”

El delantero francés se niega a abandonar el Real Madrid

Florentino Pérez ya está moviendo hilos para darle una vuelta de tuerca al ataque del Real Madrid de cara a la temporada que viene. Más que una vuelta de tuerca, una limpieza total.

Son dos los miembros de la BBC que abandonarán el Bernabéu este verano. Gareth Bale, con el que el presidente ya ha llegado a un acuerdo para su salida, y Karim Benzema. La secretaría técnica blanca da por acabada la etapa del francés en el club.

Pese a que Florentino renovó al galo hace uno meses, la intención de la renovación no era prolongar los años de relación entre Karim y el Madrid, sino que el conjunto merengue pudiera negociar su salida sin presiones y con calma.

Moneda de cambio

Y eso es lo que están haciendo. No quiere perder el tiempo y ya se están manteniendo contactos informales con varios clubes de Europa. La intención que tiene Pérez es utilizar a Benzema como moneda de cambio.

Son varios los jugadores que el Real tiene en mente para mejorar la artillería de la plantilla de Zinedine Zidane. Pero hay dos jugadores que están por encima del resto: Harry Kane y Paulo Dybala.

Ninguno de los dos le saldrá barato a Florentino. Es por eso que el presidente quiere abaratar la operación metiendo a Benzema en el traspaso. El problema que se está encontrando es que los clubes a los que ha sondeado están tasando al delantero en unas cifras muy por debajo de lo esperado.

Ni de broma

Pero al margen de los problemas para ‘colocarlo’, el máximo dirigente del Madrid tiene otro impedimento: Benzema no quiere irse. Él mismo, viendo que su nombre ya aparece en todas las quinielas, ha sido el encargado de decirle en persona que no piensa abandonar Valdebebas.

Ha llegado a oídos del crack que su presidente lo quiere usar en el traspaso de Kane o de Dybala y le ha dicho que ni de broma, literalmente “no quiero ir”. El francés sabe que no estará en ningún sitio como el Madrid, por rol y por ficha.

No quiere marcharse a un club con menos categoría y entidad que el Real. Es consciente que sería dar un paso atrás y no lo desea. De lo que no es consciente Karim es que cada vez cuenta con menos apoyos.

La afición ya hace tiempo que lo quiere fuera. El vestuario cada vez más lo ve como un problema y un tapón para los jóvenes e incluso Zidane, que siempre lo había protegido, ha dado el OK al club para que lo venda. Todos quieren que se vaya pero él se niega. Problemón para Florentino y para el Madrid.