“Asqueroso”. Vinícius calla un infierno (y Florentino Pérez no lo va a perdonar: nombres y apellidos en el Real Madrid)

La complicada situación que vive el delantero brasileño en Valdebebas

Por mucho que a más de uno en el vestuario del Real Madrid no le está sentando nada bien, lo cierto es que la progresión de Vinícius desde que llegó el pasado verano está siendo asombrosa.

Tanto es así que ahora, es uno de los jugadores que más aportan al equipo. Al principio de temporada, con Julen Lopetegui al mando, el carioca ni jugaba con el primer equipo. Lo hacía con el filial. Y las risas en Valdebebas eran de las buenas. Tanto es así que, viendo su nivel, incluso le pusieron el despectivo mote del el ‘nuevo Pelé’.

Pero cuando Solari se puso al mando del primer equipo, Florentino le dio una orden más que directa: Vinícius debía ganar peso e importancia. Lo ha hecho, vaya si lo ha hecho.

Vinícius | EFE

Vinícius calla un infierno

Es más, ahora el carioca tiene los minutos que, entre otros, ni Isco ni Marco Asensio ni Gareth Bale tienen. Cierto que el galés y el mallorquín han tenido lesiones y que la situación con Isco va más allá de lo deportivo, pero Vinícius, poco a poco, se ha ido ganando el cariño de la grada.

Y eso lo ha puesto en una situación muy delicada en el vestuario. Y es que parece ser que lo que está viviendo el carioca es un infierno, entre otras cosas porque los jugadores afectados por su buen hacer (Isco, Asensio y Bale) le están haciendo el vacío.

Vinícius no es bienvenido para muchos de puertas hacia dentro. Florentino lo sabe, y no lo va a perdonar. Entre otras cosas porque el presidente tiene muchas esperanzas en el delantero carioca.

Florentino Pérez y Vinicius | EFE

Sabe que es joven y que debe mejorar en muchos aspectos, pero no entiende ni tolera estas actitudes hacia el delantero. Veremos qué consecuencias tiene este mal rollo en el futuro, pero ya a día de hoy hay quien tiene claro que los tres, Isco, Asensio y Bale, tiene pie y medio fuera del Bernabéu mientras Vinícius acaba de arrancar su aventura. Un lío de celos “asqueroso”, como comentan voces desde dentro.