Zidane tapa las escapadas secretas de Cristiano Ronaldo

El jugador estrella del Real Madrid vuelve a las andadas

Cristiano Ronaldo siempre ha sido un profesional como la copa de un pino. Arrogante, ególatra y egoísta como pocos, pero trabajador y sacrificado.

Sin embargo, también es un tipo con una vida social activa. Le chifla salir a cenar y sentirse deseado, buscado. Que las niñas le griten «¡Cris!» como locas cuando le ven pasar en uno de sus deportivos millonarios.

No es el más fiestero del mundo, pero disfruta en las discotecas. La noche también le deleita con personajes que se interesan por él constantemente y logra encontrar fórmulas para pasar relativamente desapercibido cuando así lo quiere.

Hubo un tiempo en que las salidas nocturnas de Cristiano y sus escapadas en jet privado a Marruecos eran un problema en el Madrid. Cuando no estaba al ciento por ciento.

Zidane y Florentino se lo permiten todo

Ahora, con el cuarto Balón de Oro en las vitrinas y su ego abrumado de tantos y tantos elogios, se ha permitido volver a las andadas.

Zidane no le está muy encima. Le deja que disfrute y le pide que se olvide de la Copa. Por ello no le ha hecho viajar aSevilla.

El entrenador blanco está al corriente de nuevas fechorías del luso. Sabe que está saliendo más por las noches, que goza con su nueva novia, Georgina Rodríguez, a la que sorprende constantemente con sus contactos y privilegios.

Vuelven las escapadas a Marruecos

Le encanta presumir, demostrar que está por encima del resto, que lo puede conseguir prácticamente todo. Y ahora que todo va sobre ruedas, Zidane no va a ser quien baje a la tierra para pegarle el toque de atención. Le tapa lo que haga falta.

Florentino Pérez, el gran indignado con los viajes furtivos de Ronaldo a Marruecos, también está ahora más relajado.Todos confían en CR7 mientras aguante. Aunque cada vez tienen más claro que sus días de gloria se acercan al final.

Ese es el motivo de que se le hayan permitido, incluso, algunas escapadas recientes a Marruecos otra vez. Como en los viejos tiempos. Ahora ya no molesta.