«Zidane está como loco»: el Real Madrid llega pasado de vueltas al clásico

El técnico se juega todo el prestigio en el Camp Nou; nada vale hasta ahora

Zinedine Zidane sabe que se juega el prestigio en los banquillos en el clásico. El técnico del Real Madrid lleva tiempo preparando el partido a conciencia. «Está como loco», explican quienes le conocen. El preparador ha buscado la extramotivación de sus pupilos para el choque del Camp Nou. Es posible que el equipo blanco llegue pasado de vueltas. No hay problema: los medios afines ya se han encargado de presionar al árbitro.

Zizou ha reservado a jugadores importantes en las últimas fechas. Marcelo es uno de ellos. El lateral izquierdo ha participado en tres de los últimos partidos de la Liga. En uno de ellos, en Las Palmas, jugó un minuto; en otro, ante el Celta, 13 minutos. Lo mismo ha ocurrido con Gareth Bale, a quien ha dosificado tras su última lesión: 25, 79 y 70 son los minutos que ha aprovechado el delantero en sus tres últimas apariciones.

Suspensiones forzadas

Hay más. Zidane pidió a Pepe que forzase la quinta amarilla ante Las Palmas para llegar limpio al clásico. Incluso Sergio Ramos se perdió el partido ante el Sevilla por expulsión en el Estadio de Gran Canaria. El capitán, además ha descansado más que el resto tras marcharse de la concentración de la selección por problemas de espalda. El equipo llega relativamente fresco.

Más allá de los parámetros físicos, Zidane está buscando la motivación mental. Apunta directo al orgullo de los jugadores. Les recuerda el sangrante 0-4 de la primera vuelta. Les dice que tienen ante sí una oportunidad histórica para tapar bocas. Quiere que muerdan en el Camp Nou. Nadie antes había visto a Zizou con esta actitud en los entrenamientos. Todos se juegan mucho, a pesar de que la Liga está perdida.