Zidane busca un topo en el vestuario del Real Madrid

Zinedine Zidane está harto. El técnico del Real Madrid no puede más con las filtraciones internas que, semana tras semana, terminan siendo titulares en la prensa. El francés es consciente de que muchas cosas de las que habla, y deberían ser privadas, tienen hilo directo con los medios de comunicación. Considera que es un problema y una grave desventaja para su equipo. Cansado de esta situación, Zidane ha puesto en marcha un plan para cazar al topo.

El último dato que debía permanecer como secretario de sumario en el vestuario es la ausencia de Sergio Ramos de cara al partido contra el Eibar. Zizou ha optado por dar descanso al capitán del Madrid, que venía de jugarlo todo y de ser noticia en los últimos días por sus acciones de máximo riesgo: manos en el área, provocaciones, agresiones, y otras actuaciones a destiempo.

Ramos descansará contra el Eibar

El de Camas sigue siendo un seguro de cara al gol, ya que para ser defensa marca de forma muy frecuente, lo que ayuda a desatascar los partidos trabados. Sin embargo, por otra parte, se ha convertido en un jugador muy peligroso para la retaguardia. Zidane considera que le viene bien un descanso y, de paso, podrá dar más minutos a Pepe y Varane.

Esta noticia, que no debía conocerse hasta las horas previas al choque frente al Eibar (domingo, 16:15 horas), fue portada en numerosos diarios digitales el viernes. Ha corrido la voz en menos que canta un gallo. Y no es la primera vez.

Cristiano se molestó

Recientemente también se filtró que Cristiano Ronaldo, en su reaparición, iba a jugar tan solo 60 minutos. Ocurrió en el Madrid-Osasuna, donde los blancos golearon (5-1) a pesar de no firmar su mejor partido. Los medios avanzaron el día antes que el portugués sería sutituido en el minuto 60. En rueda de prensa –el mismo día que mordió a Xavi Hernández–, Cristiano vaciló a la prensa: «Lo sabéis todo, pero al final he salido en el 65 y no en el 60; no estabais tan bien informados». A pesar de esos cinco minutos, era evidente que se había producido otra fuga de información.