Se siembra la duda. James Rodríguez se ha vuelto a poner en el punto de mira en el Real Madrid. El colombiano cayó de las dos últimas convocatorias de Zinedine Zidane para los encuentros frente al Alavés y al Legia de Varsovia. En principio, el club blanco informó de que el centrocampista sufría pubalgia, por lo que sería baja en ambos encuentros. Las molestias en el pubis le perseguían constantemente, así que las previsiones no pintaban bien.
Sin embargo, la recuperación milagrosa de James, que ya se entrena con normalidad con el resto del grupo, ha encendido la alarma en el cuerpo técnico. Tal como informa el periodista Miguel Ángel Díaz en COPE: «Nadie se esperaba esta vuelta y el sentimiento en el club es de sorpresa, ya que los pronósticos eran mucho más negativos».
¿Fue baja por lesión o se esfumó?
James no se ejercitó en la previa ante el Alavés y, seguidamente, también se perdió el duelo de Champions en Polonia. Ahora, sin embargo, parece haberse recuperado rápidamente, por lo que entrena con total normalidad. Y es que este regreso acelerado ha encendido la llama entre bambalinas; la sospecha de que el colombiano se esfumase de los dos duelos, cobra fuerza de puertas para dentro en el vestuario madridista.
Tan es así que, según apuntas fuentes internas del club madrileño, Zidane habría mantenido una charla con el jugador para comprender cómo es posible que esté en estas condiciones, tras las dolencias aseguradas hace solo dos días. Inesperada recuperación.
El jugador, por su parte, ha tomado la palabra y no ha dudado al afirmar: «Estoy bien, no es lo que por ahí hablan de que estaba mal, que tenía algo. Solo ha sido algo suave. Para que estén tranquilos estoy bien y ya estoy entrenando para poder estar bien».
En este sentido, una vez más la sombra vuelve a caer sobre James, ya que cabe la posibilidad de que no encajara bien su rol secundario en los últimos encuentros en los que Isco Alarcón la ganó la partida. Aun así, lo cierto es que Zizou podrá contar con el colombiano para el partido ante el Leganés.
