Verratti lleva un enfado tremendo con la oferta del Barça al PSG

El crack italiano alucina con las insinuaciones que le lanza el club catalán

De ridículo en ridículo. Así va el FC Barcelona por Europa, según se ha filtrado desde París. Allí consideran que no los toman en serio.

El PSG, un club renovado a base de petrodólares de Qatar, alucina cuando el Barça intenta negociar por sus jugadores. Las ofertas, como ocurrió en su momento con Thiago Silva y Marquinhos, siempre son de broma.

La última ha sido realizada para fichar a Marco Verratti. Y, según se comenta en Barcelona, el club catalán tan solo ha ofertado 50 millones de euros.

Al parecer, el Barça también añade una serie de incentivos variables condicionados al cumplimiento de objetivos. Pero al PSG le sigue pareciendo una broma de mal gusto.

La oferta ha llegado a oídos del propio jugador y, al parecer, también habría quedado bastante desilusionado. El mercado actual habla otro idioma.

Verratti es un jugador que costará un mínimo de 60 millones de euros fijos. Y a ello seguramente habrá que añadir variables.

Pero en todos lados, y especialmente en Francia, lo tasan en una cifra aproximada que oscila entre 80 y 100 millones de euros. Quizás demasiado.

En cualquier caso, el término medio está en torno a esos 80 millones. Un mínimo que el Barça deberá asumir si quiere a uno de los referentes mundiales para su medular.

Los motivos del cabreo

Pero el enfado de Verratti no acaba ahí. El club azulgrana le ha mandado una serie de insinuaciones a su representante que no han gustado al italiano.

En primer lugar le dicen que si el PSG no rebaja sus pretensiones económicas, tendrá que asumir una considerable rebaja en su salario. Algo que en su día asumieron algunos futbolistas como Javier Mascherano y Cesc Fàbregas.

Pero no queda ahí la cosa. También animan al jugador a que haga presión para salir del club. No todavía, pero sí llegado el momento.

Y la respuesta de Verratti es clara: mientras no haya una oferta decente no moverá ni un dedo. No se arriesga a quedar mal con la que ha sido su afición desde 2012, cuando aterrizó en París procedente del Pescara a cambio de tan solo 12 millones de euros.

El PSG sigue el camino de formar un equipo ganador. Y no puede dejar escapar a su mejor jugador en la media.

Los catarís no quieren más dinero, pues ya tienen de sobra. Quieren a los mejores jugadores.