Valverde mata a un jugador del Barça en Valencia (y Messi lo remata)

El candidato para abandonar el equipo de forma inmediata y fulminante

Revulsivo. Eso es lo que necesitaba el FC Barcelona en la segunda parte del choque que terminó empatando ante el Valencia en Mestalla. Después de la mejor primera parte de la temporada de los de Ernesto Valverde, los blaugrana bajaron el nivel en la segunda y por poco le cuesta al conjunto culé la primera derrota de la temporada.

Después del gol de Rodrigo Moreno los del Txingurri fueron recuperando el orden y el control del partido, pero las fuerzas no estaban siendo suficientes.

Tanto es así que hasta el técnico realizó pronto los cambios, algo a lo que no nos tiene muy habituados. Sin embargo, aparte de refresco, los que entraron no aportaron ese punto de calidad/intensidad que requería el equipo.

A la tercera tampoco va la vencida

Sobre todo Gerard Deuofeu, que este domingo firmó los peores 26 minutos desde que el pasado verano regresó por tercera vez al conjunto catalán, de las que ya fracasó en las dos anteriores.

El de Riudarenes no aportó nada en ataque, tampoco en defensa y fue más un lastre que una ayuda. El canterano perdió varios balones y solo ganó dos balones de los siete que disputó.

Para más inri, se quedó tumbado en el suelo protestando una supuesta falta con el 1-0 en el marcador en uno de los momentos en que el partido estaba más roto y con el Valencia iniciando una contra que bien podría haber acabado en el tanto de la sentencia.

La mala actuación no pasó desapercibida para el míster ni para los responsables, así como tampoco a los pesos pesados del equipo. Los capos, secundados por Leo Messi, apuntaron al término del partido que si Gerard y su actuación deben ser el revulsivo del equipo, pocas cosas ganarán esta temporada.

Castigado

Valverde ya puso en la nevera al delantero en los últimos partidos. Concretamente, Deulofeu solo fue titular en uno de los últimos ocho partidos de los culés en LaLiga y solo en uno de los últimos dos de Champions League, contra la Juventus de Turín, en el que fue sustituido a los 55 minutos por Messi.

La actuación de este domingo no hace más que sumar enteros para que el míster lo mantenga lejos del terreno de juego, algo que también han pedido los cracks desde el núcleo duro del vestuario. Los jugadores quieren mantener el rendimiento y la trayectoria del equipo, y consideran que al extremo le falta mucho trabajo que realizar para ponerse a la altura el resto de compañeros.

Además, la temporada no será fácil, y menos con los árbitros remando en contra, como ocurrió en el encuentro ante los chés. Con todo, el equipo necesita la mejor versión de todos los efectivos. Quién no sume, avisan, se queda fuera.