Sergio Ramos tiene montado un cristo en el Real Madrid

El poder del defensa internacional es visto con gran preocupación por Florentino Pérez

Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, ya no tiene tan claro que Zinedine Zidane haya sido una buena apuesta para reactivar al equipo. El presidente de ACS detecta que el entrenador francés es demasiado blando con los líderes del vestuario y, especialmente, con su capitán, Sergio Ramos. El defensa andaluz tiene mucho poder en la plantilla y sus continuos viajes a Sevilla molestan a la junta directiva.

Sergio Ramos no es un capitán dócil para Florentino Pérez. El defensa no se posiciona públicamente en la misma línea que el presidente. Al contario. Fue uno de los líderes que pidió la cabeza de Rafa Benítez y ahora manda mucho en el vestuario. Demasiado para el máximo dirigente.

Florentino visualiza muchos paralelismos entre Zidane y Carlo Ancelotti. Con el técnico francés, los jugadores se sienten mucho más cómodos que con Benítez porque no es un entrenador intervencionista ni vigila todos sus movimientos. Al contrario. Les da mucha libertad porque prioriza que los futbolistas estén contentos.

El abrazo

El presidente del Real Madrid, en cambio, prefiere un entrenador que ponga orden en el vestuario. Un técnico de perfil duro. Y una imagen, según cuentan en los despachos del Bernabéu, le preocupa mucho. Fue el abrazo entre Zidane, Ramos y Cristiano Ronaldo en Roma tras el gol del delantero portugués.

Florentino Pérez comparó esta imagen con la vivida en años anteriores con Ancelotti. Ve que Zidane es visto como un amigo con los pesos pesados del equipo, a quienes trata con mucha generosidad. En cambio, es mucho más duro con Kroos, Modric y compañía. Y el presidente del Real Madrid intuye problemas. A él no le gustan los abrazos, sino la disciplina y el trabajo. Por eso, ya duda de Zidane.