Sergio Ramos se las tiene con un jugador por menospreciar al Real Madrid

El capitán pone en su sitio a un crack en el vestuario

Una cosa son los problemas que tenga un jugador con algún miembro del vestuario o con la directiva y otra es fallar al equipo. Sergio Ramos le tuvo que poner en su sitio.

Llegó en 2014 y sus dos primeras temporadas fueron estelares. 53 partidos en cada una y un total de 17 goles y 23 asistencias. Espectacular.

En su tercer año el rendimiento volvió a estar a la altura. Apareció en menos ocasiones ( 43 partidos) pero dejó números muy exigentes.

Anotó cinco goles y dio 11 asistencias. Sin embargo, su peso en el equipo mermó con la llegada de Zinedine Zidane y el futbolista estudió dejar el club en verano.

Zizou interviene

Isco Alarcón lo tenía hecho con el Manchester City. Era cuestión de detalles. Pero Zidane intervino y le pidió que se quedara. Le prometió minutos y presencia en el equipo. Nada de eso.

El centrocampista ha participado en 20 partidos entre todas las competiciones, pero el número de minutos ha descendido en gran medida. El jugador ha perdido totalmente la titularidad y solo sale de inicio por necesidad o en partidos poco importantes.

Lo paga con el equipo

La situación desembocó en la decepción del jugador. Se sintió engañado por el técnico y ahora se ve atrapado en el Madrid. La situación llevó al malagueño a perder el compromiso con el equipo.

A Sergio Ramos no le gustó nada la reacción del media punta, que agotó su paciencia en el partido ante el Celta de Vigo. Alarcón se borró del terreno de juego. Los madridistas jugaron con un hombre menos.

El equipo está por encima de todo. De cualquier jugador. De cualquier promesa que le haya hecho nadie. No tolerará una actitud así de nadie. Si se quiere ir que se vaya, pero nunca debe perjudicar al equipo.