Sergio Ramos avisa al presidente: si viene habrá guerra. Fichaje vetado por el vestuario del Real Madrid

El capitán del Real Madrid Sergio Ramos se carga un posible fichaje de Florentino Pérez

Sergio Ramos
Sergio Ramos

Sergio Ramos es uno de los hombres fuertes en el vestuario del Real Madrid. De hecho, desde que se fue Cristiano Ronaldo de Valdebebas, el de Camas es el rey del vestuario. Tan veterano como implicado, el central se lleva a las mil maravillas con Zidane y con buena parte de la plantilla.

Una plantilla que, si bien es cierto que en muchas posiciones anda coja y está descompensada, tiene una relación mucho más cerrada y buena que la que se vive a día de hoy en el vestuario del Barça.

Sergio Ramos
Sergio Ramos

Y Ramos, que sigue negociando con el club su renovación sabe muy bien lo importante que es tener un vestuario donde los egos se dejen en la puerta y donde todos remen unidos.

Sergio Ramos mueve ficha

De ahí que ya le haya dejado claro a Florentino Pérez, que está preparando ya la ofensiva en cuanto a fichajes de la próxima temporada, que hay ciertos jugadores de los cuales los pesos pesados no quieren saber nada.

En concreto todos aquellos que están bajo el paraguas de Mino Raiola. El polémico agente italiano tiene en nómina a varios cracks que suenan desde hace tiempo para el Madrid. Desde Paul Pogba a Erling Haaland pasando por otros como Matthijs De Ligt o Marco Verratti.

Ramos, que lleva ya muchos años en el mundo del fútbol, sabe muy bien que Raiola ‘endiosa’ tanto a sus jugadores a base de contratos bestiales que muchos de ellos acaban convirtiéndose en un problema en varios de los vestuarios que pisan.

Paul Pogba
Paul Pogba

El caso de Zlatan Ibrahimovic, Mario Balotelli o el propio Pogba son ejemplos de ello. Ramos sabe que el Madrid necesita refuerzos, pero ni él ni los Benzema, Modric, Kross y compañía quieren a un nuevo divo en Valdebebas que rompa el buen rollo interno que se vive desde hace ya un tiempo en el Madrid.

Florentino, que tampoco es que tenga a Raiola entre sus agentes favoritos, ha tomado nota. Veremos, eso sí, hasta qué punto este veto del vestuario acaba afectando o no a la toma de decisiones del presidente.