“Quiere vengarse de Messi”. Florentino Pérez ofrece un tapado de 100 millones a Zidane

El crack inesperado del presidente del Real Madrid

Es de dominio público que Zinedine Zidane no cuenta con Gareth Bale. El míster ya se lo ha comunicado al jugador y a Florentino Pérez. De hecho, Zizou le había pedido al presidente que se lo quitara de encima antes de empezar la pretemporada. Y la gestión que hizo con el británico en el último tramo de la temporada dejó claras sus intenciones con el crack. De los once partidos que dirigió en el último tramo de la temporada, Bale solo fue titular en cuatro. Y fue principalmente para ponerlo en el escaparate, no por gusto del técnico.

Además, Gareth se quedó fuera en dos de las tres últimas convocatorias, y en el último partido del año en el Santiago Bernabéu, que podría haber sido el último de Bale en el Madrid, no jugó ni un minuto. Zidane no le dejó despedirse de la afición vestido de corto.

Zinedine Zidane y Gareth Bale

Zidane se harta de Bale

Una situación a la que el míster francés ha llegado por varios motivos. Por un lado, el técnico no está contento con su rendimiento deportivo. Sus números dejan muchísimo que desear. No son los de un crack que aspire a liderar un equipo. Y esta falta de liderazgo también ha influido en la decisión del técnico.

Sin olvidar los episodios de pasotismo del delantero. Sus momentos de desidia han quedado en evidencia en más de una ocasión. Por ejemplo, cuando en su primera etapa el de Cardiff se dejó las botas de fútbol dentro del vestuario en un partido en el que empezó de suplente. El delantero tuvo que volver al vestuario con el partido empezado.

Resultado de imagen de bale banquillo leganesO en el último partido de la pasada temporada, en el que Zidane lo dejó en el banquillo. Como si la cosa no fuera con él y como si todo se tratara de una broma, el jugador se lo pasó en grande en la banda. Y ojo, porque el Madrid acabó perdiendo (0-2).

El Real Madrid busca una salida a Bale

Sin embargo, las ofertas que llegan de momento no cubren las pretensiones de Florentino Pérez. Y el jugador tampoco aceptará el primer contrato que le pongan por delante. Y mientras el tiempo pasa, su precio cae en picado. Las propuestas van a la baja cada día que pasa.

Aun así, en el Real esperan encontrarle finalmente una salida. Y prueba de ello es que ya están buscando a su sustituto. Al menos, si no sale, le dejarán claro que es una de las últimas opciones para el míster.

Las propuestas para relevar a Bale

Kylian Mbappé es el que todos querrían en Chamartín. Pero en Concha Espina con conscientes de la dificultad de su fichaje. Y más después del tuit que publicó el crack pesando con la camiseta del equipo galo junto al mensaje “Esto es París”. Por eso tienen más de un plan B en la hoja de ruta.

El plan B a Mbappé

Uno de ellos es Sadio Mané, del Liverpool. El senegalés ha sumado este curso 26 goles y 5 asistencias en 50 partidos, siendo uno de los mejores de la Premier League una pieza clave para que los reds se alzaran con la Champions League en el Wanda Metropolitano.

El tapado de Florentino Pérez

Y ojo al otro. Un tapado que le costaría al Madrid unos 100 millones de euros, más económico que Mané. Hablamos de Paulo Dybala, de la Juventus de Turín. El delantero argentino no está a gusto en el club transalpino desde que llegó Cristiano Ronaldo. La llegada del luso le ha privado de ser el líder del equipo que apuntaba a ser. Y cuando coinciden en el campo se siente eclipsado por CR7, cuyo juego choca con el suyo. De hecho, Massimiliano Allegri le tuvo en el banquillo algunos partidos a principios de temporada.

Un Dybala al que el equipo bianconero estaría dispuesto a vender y que estaría encantado de salir de la Juve. Más si es para recalar en el eterno rival del equipo de Leo Messi. “Quiere vengarse de Messi”, han comentado en más de una ocasión en su entorno. Su relación con el astro culé nunca gozó de muy buena salud. No olvida, por ejemplo, que en el mundial de Rusia se culpara a todos los jugadores del desastre excepto al crack culé. Y le encantaría medirse de tú a tú con el de Rosario en la misma competición.