PSG, City, United, Chelsea y Real Madrid: desmontando la operación Leo Messi

El precio prohibitivo del astro argentino obliga a buscar fórmulas creativas para esquivar el Fair Play Financiero

El fichaje de Leo Messi, cinco veces Balón de Oro, es una operación imposible a ojos del mercado. No se puede cerrar por menos de 500 millones de euros. En los cálculos realizados por GOL, la cifra exacta se dispararía a unos 525 millones, teniendo en cuenta diversos factores. Solamente el Real Madrid, el PSG, el Chelsea y los dos grandes de Manchester –United y City– tienen opciones remotas de abordarlo.

Fichar a Messi implica, como mínimo, el pago de la cláusula de rescisión del jugador –a menos que el Barça aceptase otra oferta para permitir su salida–, cifrada en 250 millones de euros. A esto habría que añadir un salario mínimo de 50 millones durante cinco años. Otros 250 kilos.

Los 525 millones, al desnudo

Los 50 millones, porque en el Barça ya cobra 40 al año, y no tendría sentido que se fuese por el mismo dinero. Cinco años son los que debería exigir el jugador para garantizarse un último gran contrato, ya que este 2016 cumplirá 29 años. También al club comprador le interesaría firmar un contrato largo, para poder fraccionar mejor la amortización del dinero invertido en su fichaje.

Además de los 500 millones de euros citados, hay que sumar las comisiones. Como mínimo, la de sus agentes, donde manda el padre del futbolista, Jorge Horacio Messi. Estas comisiones son, al menos, del 5%, tanto del salario como de un traspaso. Por tanto, y tirando corto, habría que calcular el 5% de los 250 millones de la cláusula –12,5 millones– y el 5% de su salario anual, que en el cómputo global sería también de 250 millones: otros 12,5 millones.

Partidas accesorias

Como mínimo, 25 millones de euros en comisiones. Esto podría ser más en caso de firmar un contrato por seis temporadas y en el supuesto de que las comisiones sean del 10% por alguno de los dos conceptos. En el caso de que intervengan intermediarios, también se llevarían comisión. Con lo que no sería raro que la operación se elevase a unos 540 0 550 millones.

Demasiado dinero hasta para los clubes más grandes de Europa. Una inversión tan elevada se saltaría todos los controles del Fair Play Financiero de la UEFA. El club comprador debería acreditar una masa de ingresos mucho más elevada para compensar las pérdidas que generaría la operación más grande de la historia del fútbol. Una utopía.