Neymar presiona para meter un fichaje en el Barça (y cargarse otro)

El crack brasileño tiene claro por donde van los tiros para reforzar el equipo

El próximo verano volverá a ser de cambios en can Barça. Habrá fichajes de futbolistas, aunque menos que en 2016. Y habrá nuevo entrenador: Luis Enrique Martínez está fuera.

La decisión de la no continuidad de Lucho está tomada. Y no por la directiva –que también la valora seriamente– sino por el propio técnico.

El asturiano está muy cansado. El desgaste, que también se llevó por delante a Pep Guardiola, está haciendo mella también en su persona.

Cree que lo mejor tanto para él, como para el club y para su propia familia es tomarse un respiro. Ama el Barça, pero no puede más y el equipo se resiente.

En el vestuario tienen bastante claro que el entrenador marchará y ya hacen cábalas sobre lo que ocurrirá el próximo curso. Antes tratarán de recuperar la mejor versión.

Muchos rumores apuntan a Jorge Sampaoli como el elegido para relevar a Lucho. El argentino lo tiene todo: gusta a Leo Messi, es serio, disciplinado, hábil leyendo los partidos y apuesta por el juego de toque, posesión y velocidad que caracteriza al estilo Barça.

Sin embargo, así como los argentinos y Luis Suárez estarían encantados con Sampaoli, la tercera punta del tridente no lo ve tan claro.

Neymar entiende que Sampaoli reforzaría más, si cabe, la hegemonía de Messi en el Barça y sería un nuevo impedimento para la progresión del brasileño, algo estancado.

El centrocampista elegido

Lo que sí que tiene claro Neymar es la necesidad de reforzar el centro del campo con más talento. André Gomes no cuaja.

Andrés Iniesta y Sergio Busquets no brillaron contra el Atlético. Este año están sufriendo más de lo normal. Falta savia nueva. Pero con talento de verdad.

Neymar apuesta por un jugador muy desequilibrante en la Premier League que, además, es buen amigo suyo: Philippe Coutinho.

El centrocampista del Liverpool estaría encantado de hacer las maletas rumbo al Barça, donde tendría que ganarse el sitio. Talento tiene para intentarlo.

El fichaje de Coutinho, no obstante, situaría a varios miembros del centro del campo azulgrana en el disparadero: Arda Turan, Rakitic y el propio Gomes.

Coutinho, de 24 años, está valorado en 40 millones de euros –lo que se pagó por Arda y Gomes más o menos– y sufre con un equipo mediocre: quintos clasificados.