Morata no es el único que amenaza con irse si sigue Zidane en el Real Madrid (Hay tres nombres más y una sorpresa)

Crece el número de jugadores indignados con el técnico

Balsámica. La victoria ante la Real Sociedad calmó los ánimos. Las aguas vuelven a su cauce después de dos semanas convulsas.

El Real Madrid puso fin a la mala racha de dos empates, dos derrotas y el mal partido en la victoria ante el Málaga con una goleada en el Santiago Bernabéu.

Los resultados vuelven a salir adelante y el equipo de Zinedine Zidane vuelve a estar como a finales de diciembre, cuando lo ganaban todo.

Pero las victorias no lo solucionan todo. Las rencillas entre los jugadores y el mal rollo de algunos con el entrenador siguen patentes. Alguno incluso se ha sumó en las últimas horas.

Promesas incumplidas

Que James Rodríguez no cuenta para el entrenador es una evidencia desde hace semanas. Desde su aparición en la ida de los octavos de final de la Copa del Rey ante el Sevilla no se ha sabido nada más.

El francés alude a molestias. La realidad es que no hay parte médico y que el colombiano no entrena con el equipo. El media punta no cuenta para el míster y James se cansó de luchar. Los privilegios del galo pueden más que las necesidades del equipo.

Isco Alarcón es otro de los que se siente engañado. Le prometieron oportunidades que no tiene y las que le dan son cuando los partidos ya están decididos.

No quiere convertirse en el eterno suplente de lujo y ya avisó que si sigue Zizou se machará. Lo hará este verano si llega una buena oferta y si no esperará al 2018, cuando tenga la carta de libertad.

El delantero Mariano Díaz también está profundamente decepcionado. Le subieron del filial bajo la promesa de tener minutos. Al principio tuvo alguna oportunidad y la aprovechó con goles, pero no convenció a nadie.

El delantero no esconde que quiere labrarse un futuro lejos del Santiago Bernabéu sí o sí. Las cosas aquí no cambiarán, como mínimo, a medio plazo.

Otro indignado

El último en sumarse a esta lista fue Marco Asensio. Finalizó su cesión en el Espanyol, donde era uno de los cracks, para hacerse un hueco en el conjunto blanco. Sin embargo, su presencia es mínima. El centrocampista suma 13 partidos disputados, y  solo fue titular en cinco.

Ante la Real se vio un buen resumen de su situación. Entró en el minuto 84 cuando el luminoso ya mostraba el 3-0 definitivo. Asensio no quiere prolongar más esta situación. Necesita minutos y sabe que en el Madrid no los tendrá.

Todos ellos se suman al ya conocido descontento de Álvaro Morata. El delantero se reivindica con goles en las contadas ocasiones que le concede Zinedine, pero ni así convence al cuerpo técnico.

Con la eliminación de los blancos de la Copa las oportunidades para ellos serán aún más escasas. Ahora sí que las cosas no cambiarán. Los jugadores ya lo tienen decidido. Quieren salir ya.