Mino Raiola complica el fichaje de Pogba por el Barça

En el club todavía resta el poso de las miserias que dejó el polémico agente: "Dios los cría y ellos se juntan"

Mino Raiola es non grato en el FC Barcelona. Su polémica forma de hacer dejó un mal poso en el recuerdo de la actual junta directiva del club que todavía no se ha superado. Si no hubiese más remedio, la cúpula del Barça se entendería con él, siempre que el fichaje de Paul Pogba sea el deseo expreso de Luis Enrique. Sin embargo, fuentes internas del club han confesado a GOL que preferirían no tener que volver a tratar con Raiola.

Estas duras palabras son fruto de un turbio recuerdo: la polémica salida de Zlatan Ibrahimovic del Barça. Las mismas fuentes han relatado a este diario un episodio que pudo terminar peor. La venta –disfrazada de cesión– de Ibra al Milan suponía una pérdida de aproximadamente 30 millones de euros para las arcas del club. Ello comportaba, a su vez, que los directivos tendrían que avalar con un millón de euros más en su segunda temporada. Pasando de los tres millones iniciales, a cuatro.

Polémico episodio con Ibra

La firma del acuerdo con los emisarios del Milan se produjo en Barcelona. Pero ni el futbolista ni Raiola lo pusieron nada fácil. «Ibrahimovic no firmó el acuerdo hasta las tres de la mañana. En el último momento, a punto de estampar la firma, dijo que no firmaba si antes no le hacían un favor. Quería que alguien del club enviase un mensaje a Pep Guardiola en tono amenazante de su parte: ‘Ibra dice que tengas cuidado la próxima vez que lo veas’. Sandro Rosell estaba exhasperado, y Mino Raiola no hacía nada por calmarlo, sino que le reía las gracias», narran.

Pogba no encaja

Este ingrato recuerdo hace que la actual junta mire con recelo a Raiola. Por eso, en verano, utilizaron a Braida para llevar las negociaciones directamente con la Juventus, mientras Joan Laporta, el candidato opositor, presumía de su buena relación con el agente para fichar al francés.

Pogba es un jugador que, a primera vista, no termina de encajar en el estereotipo de persona que predomina en el Barça. Le gusta excesivamente llamar la atención y el hecho de que su agente sea Raiola no convence a la cúpula: «Dios los cría y ellos se juntan».