Messi se enzarza en una pelea que arrastra a Piqué, Busquets y Jordi Alba

El capitán del Barça Leo Messi mueve ficha y traslada toda la presión del vestuario a Joan Laporta

Leo Messi
Leo Messi

Leo Messi ya no sonríe como sonreía hace unas semanas. El Barça que se hizo con la Copa del Rey y encadenó muchos resultados positivos hace unas semanas fue tan sólo un espejismo.

Un oasis en un desierto que el argentino lleva viendo desde hace años. Messi, cuentan, está cada día más cerca de renovar. Tiene fe en Joan Laporta y ve que el proyecto deportivo parece ir por buen camino. La semilla es buena, con jóvenes viviendo desde abajo y con jugadores veteranos como él mismo o Piqué, Busquets o Jordi Alba que han dado de nuevo un paso al frente.

Sin embargo, para el ‘10’, la pieza que falla, el problema real ahora que la directiva ya no es el principal foco de atención del de Rosario es Koeman. La figura del técnico, de hecho, está provocando ya una pelea evidente entre el vestuario y la figura de Laporta.

Messi mueve ficha con Laporta

Y es que el argentino y otros como Piqué, Jordi Alba y Busquets, entre otros, no entienden cómo Laporta puede seguir apostando por Koeman. Es evidente que, a falta de una jornada para que acabe una Liga en la que el Barça ya no tiene opciones reales de ser campeón, el presidente no va a sustituir a Ronald.

Sin embargo, lo que preocupa y enfada a Messi y compañía es que la directiva no se haya apresurado en atar a su sustituto cuanto antes. El nombre de Xavi Hernández es el que más entusiasma tanto al vestuario como a buena parte del barcelonismo.

Es cierto que, como apuntaron recientemente en el diario ARA, parece que las negociaciones entre Laporta y Xavi, que acaba de renovar con el Al-Saad de Qatar, ya han empezado. Para Leo y el resto, el tiempo es oro.

Leo Messi
Leo Messi

La temporada está a días de acabar y el Barça tiene muchos deberes por delante. Cuanto antes se ponga el nuevo entrenador no tanto a trabajar con el primer equipo, que se irá de vacaciones en breve, sino con la secretaría técnica a diseñar la confección de la plantilla, mejor para todos.

Pero Messi, Piqué, Jordi Alba y Busquets ven con nervios la parsimonia con la que Laporta está gestionando una situación que debería haberse resuelto desde hace semanas. Tener a Leo impaciente y enfadado no parece que sea la mejor manera de afrontar su renovación. Laporta, en este sentido, está jugando con fuego.