Sobre la mesa. Leo Messi es el dueño y señor del vestuario del FC Barcelona. Dentro del club azulgrana el argentino hace y deshace a su libre albedrío. Y es que a día de hoy es la pieza más preciada en el Camp Nou; el gran crack.
Por ello, el atacante de Rosario sabe que tiene un as en la manga; puede tensar la cuerda para conseguir que sus deseos sean órdenes en los despachos barcelonistas.
La gran demanda de Messi al barça
En este caso, parece ser que la última voluntad que Leo ha trasladado a la cumbre culé tiene que ver con la plantilla actual.
En unas semanas en las que los resultados no sonríen al cuadro de Luis Enrique Martínez, el astro sudamericano ha aprovechado para evidenciar la necesidad de una demanda existente.
El equipo barcelonista está demostrando que el modelo tiki-taka está en crisis. El toque de balón ya no brilla como antes y la efectividad del Barça se ha visto truncada.
Los nuevos refuerzos fichados este verano no están brillando, por lo que especialmente el centro del campo se está resintiendo. Con un Ivan Rakitic que no está en su mejor momento y un Andrés Iniesta que justo ahora vuelve a entrar en la convocatoria tras su lesión, el conjunto azulgrana no está convenciendo.
Cierto es que en el partido del pasado martes en Champions el Barça se reencontró con las buenas sensaciones. Pero sin embargo, el rival era más que modesto y el partido era intranscendente.
El nuevo Xavi Hernández
Consciente de que este grave problema en la medular, Messi parece haber puesto una demanda sobre la mesa: quiere un verdadero sucesor de Xavi Hernández. Insta a la secretaría técnica a mover ficha y barrer en el mercado para encontrar a la perla que cubra esta necesidad.
A Andrés Iniesta ya le empieza a pasar factura la edad, por lo que el club culé necesita un buen hombre para el centro del campo. Ni André Gomes, ni Denis Suárez, ni Rafinha convencen, por que Leo reclama un jugador más creativo y con más toque.
El delantero necesita un buen compañero para lucirse y volver a mostrar su máximo nivel. No todo es dinero lo que pide; quiere mantener el caché. Por ello, considera que el equipo de Lucho precisa un director de orquesta de primer nivel.
La demanda está sobre la mesa, mientras que a su vez se sigue negociando la renovación del crack argentino.
