Los capitanes del Barça planean pillar a Neymar por banda cuando vuelva

Algunos pesos pesados del primer equipo han marcado en rojo la fecha de su regreso para tener una charla con el brasileño

Nuevo lío en el FC Barcelona. Buena parte de la plantilla que compone el primer equipo está molesta. Entienden que hay demasiados tratos de favor para con algunos jugadores. En este caso, para Neymar Júnior da Silva. Algunos no ven con buenos ojos que el delantero brasileño exija los mismos privilegios que Leo Messi. Y menos, que el club se los conceda. Es por ello que los capitanes y otros pesos pesados del equipo ya planean pillar por banda al jugador en cuanto regrese de Brasil y darle una charla para que baje los humos.

El último episodio viene por los días de vacaciones extra que Luis Enrique ha concedido al delantero brasileño. Este lunes ha trascendido que Neymar no tendrá que incorporarse con el equipo hasta septiembre, con lo que se perderá el próximo partido de Liga frente al Athletic Club en San Mamés, que se juega el domingo. Tras este encuentro llega el primer parón de selecciones, en el que Ney ha sido convocado para jugar con la absoluta de Brasil los días 1 y 6 de septiembre. Por tanto, no regresará a la disciplina azulgrana hasta pasada esa fecha.

Neymar, por tanto, tendrá más vacaciones que el resto de la plantilla. Ya disfrutó de ellas mientras los demás internacionales jugaban la Copa América o la Eurocopa. Rafinha, que también jugó con Brasil en Río 2016 y participó en la conquista de ese preciado oro olímpico aunque no fuese titular, se incorpora a la disciplina de Luis Enrique este mismo miércoles. Trato desigual.

Para Neymar no existe la palabra no

En el vestuario reina la sensación de que nunca hay un «no» cuando se trata de Neymar. Su fichaje costó un proceso judicial debido a las altas exigencias económicas de la familia, que forzó para firmar una serie de contratos que generaron una ola de indignación. El club será condenado por ello, quedando manchados sus antecedentes penales, mientras el mismo Barça se hace cargo de todos los gastos que se derivan del asunto. A ello se suma ese rol de querer jugarlo todo a pesar de su corta edad sin que le digan que no; de darle las vacaciones que pide (también en Navidad), aunque superen al resto, y de tener, en definitiva, un trato de favoritismo que nunca gusta en un equipo.