Lo que el Real Madrid no quiere que se sepa de Gareth Bale

El club que preside Florentino Pérez reconoce que tiene un problema grave con el galés

Gareth Bale es la niña de los ojos de Florentino Pérez. Eso, al menos, aseguran en los despachos del Santiago Bernabéu. Rafa Benítez, el capataz, también quiso potenciar al futbolista galés. Los deseos del presidente y del técnico, sin embargo, saltan por los aires porque que Bale se lesiona con mucha frecuencia y el Real Madrid ya no puede esconder que tiene un problema grave con el futbolista.

En el Bernabéu y en Valdebebas ya comparan a Bale con McManaman, aquel genial futbolista inglés que tenía mucha clase pero que se lesionaba con mucha frecuencia. El galés también se está perdiendo muchos partidos por sus molestias físicas y fuentes del Real Madrid dicen que debería descansar cada cinco o seis encuentros. Si no para, el riesgo de una sobrecarga muscular se dispara.

Con 24 años, 30 lesiones

Bale siempre ha sido un jugador propenso a las lesiones. Cuando tenía 24 años ya acumulaba 30 lesiones. Entre 2007 y 2013 tuvo problemas en los tobillos, en las rodillas, en los talones, en los glúteos, en la espalda, en el hombro, en las ingles, en los isquiotibiales y en la cadera. Y en septiembre de 2015 ya acumula cuatro lesiones en los gemelos en apenas dos años.

El Madrid busca soluciones. Bale, curiosamente, es intocable. A final de temporada, Florentino quiere vender a Benzema y Cristiano Ronaldo. Con el galés, en cambio, se resiste. Sólo aceptaría su marcha si cobra los 143 millones de euros que, en Inglaterra, dicen que está dispuesto a pagar el Manchester United.