La victoria en el clásico no sirve en el vestuario del Real Madrid

A tres puntos del Barça, el Real Madrid se juega mucho más en el clásico. Un empate agravaría las dudas que suscita el actual proyecto que lidera Rafa Benítez y una derrota podría resultar letal para el técnico madrileño. A su equipo solo le vale la victoria para atrapar al eterno rival, pero en el vestuario blanco no se conforman con los tres puntos. Los jugadores quieren más. Mucho más. Se exigen una goleada para asestar un golpe de efecto al Barça.

Los futbolistas del Real Madrid se sienten superiores al Barça. Creen que su plantilla es más amplia y tiene más calidad. Pero creen que el gran problema está en la dirección. En Rafa Benítez. Los jugadores están convencidos de que los planteamientos conservadores del técnico debilitan al equipo. Por ello, quieren salir al ataque. Cristiano Ronaldo, Sergio Ramos y Marcelo ya se lo expresaron al entrenador en una reunión que mantuvieron el pasado lunes en Valdebebas.

Menos recursos

El Madrid cree que el Barcelona actual es mucho más frágil que el de la pasada temporada. Si juega Messi, el argentino estará a un nivel inferior al habitual. Si no juega, el Barça se convierte en un equipo con menos magia, mucho más previsible. Neymar no asusta en el Bernabéu. Tampoco Luis Suárez.

Los jugadores del Madrid creen que el Barça va muy justo. Reconocen que es un equipo cada día más equilibrado, pero con menos talento que el suyo. Y, sobre todo, con menos recursos en el centro del campo. En la sala de máquinas, Benítez tiene muchas más piezas para elegir. Luis Enrique, en cambio, va muy justito. La probable ausencia de Rakitic todavía debilita más al Barça. Por ello, los jugadores del Madrid se exigen una goleada. Un 4-0 o un 4-1 para cambiar la dinámica de la Liga.