La última locura de divo de Cristiano Ronaldo en el Real Madrid 

Renovación a la vista. Cristiano Ronaldo tiene un objetivo claro en estas primeras semanas de temporada. El crack luso regresó de sus vacaciones lesionado, por lo que sigue ejercitándose al margen del grupo con un programa de rehabilitación específico. El portugués ya se encuentra en la recta final de la recuperación de la lesión que sufrió en el último partido de la Eurocopa con Portugal. Y es que si no hay contratiempos, todo apunta a que el delantero de Madeira debutará en el próximo partido frente al Osasuna.

Sin embargo, el foco de atención no solo está puesto en el terreno de juego, ya que Cristiano y Florentino ultiman la renovación del contrato del luso en los despachos. Y es que al parecer las tres partes implicadas, jugador, presidente y agente, ya han llegado a un acuerdo sobre la mejora y la ampliación en el contrato del portugués, por lo que la firma final es cuestión de días. En este sentido, el club blanco quiere cerrar el acuerdo cuanto antes, ya que la celebración de Ronaldo tapará el cero en el marcador en esta campaña de compras estival.

La gran celebración

Florentino desea volver a ilusionar a la afición y considera que con la firma de Cristiano lo conseguirá. El supercrack es el pilar fundamental del equipo, por lo que atarlo por cinco años es todo un éxito para la entidad madridista. No obstante, no será un acto que pase desapercibido, ya que el portugués no se conforma con un apretón de manos y una cámara que retrate el momento. El delantero desea una renovación galáctica, quiere vestir de gala el palco del Santiago Bernabéu por y para él.

Frente a estas exigencias, parece que el magnate madrileño ha aceptado. Y es que a Florentino también le interesa vender esta renovación como  ‘el fichaje galáctico’ de la temporada. Por todo ello, los empleados del estadio ya están trabajando a destajo para ultimar un acto sonado en el que no faltará de nada. Cristiano quiere celebrar por todo lo alto los 20 millones de euros netos que cobrará a partir de ahora. La fiesta está servida.