La trampa que Messi prepara al Real Madrid después de reventar al Espanyol (y el aviso de Cristiano Ronaldo a Zidane)

El buen fútbol azulgrana se impuso al incómodo Cornellà-El Prat

Serio e intenso partido de fútbol el que se vivió este sábado en Cornellà-El Prat. El derbi catalán se saldó con una victoria muy sufrida para el equipo con más seguidores de Barcelona.

El Barça pudo con el férreo Espanyol (0-3) de Quique Sánchez Flores, que hizo un planteamiento defensivo pero valiente, con líneas de presión muy adelantadas.

Los pericos incomodaron al cuadro azulgrana durante los 90 minutos junto a una afición que empujó y los llevó en volandas: a base de insultos constantes, sin ningún tipo de pudor.

Los de Luis Enrique aprovecharon el prácticamente único error del rival, obra de Jurado, para inaugurar el luminoso con el gol de Luis Suárez (’50). El uruguayo anotó también el tercero (’87) fruto de un nuevo fallo clamoroso de la defensa blanquiazul. 

En líneas generales, los delanteros del Barça no acabaron de estar inspirados fruto, en parte, de un deficitario centro del campo con Rakitic, autor del segundo (’77), y André Gomes. Sin Iniesta, ambos perdieron más balones de la cuenta. 

Busquets compensó la falta de acierto de sus compañeros con un partido brillante, tanto al corte como en la elaboración, pese al agresivo marcaje que le propinó el ex blaugrana Víctor Sánchez. Busi estuvo secundado por el trabajo encomiable de los dos centrales: Piqué y Umtiti.

Tan bien están los jefes de la zaga culé que Mascherano volvió a quedar fuera del once, como ocurriera en el clásico. El argentino podría vivir sus últimos días de azulgrana.

Complot de argentinos

La lucha por la Liga sigue al rojo vivo. Barça y Real Madrid han hecho los deberes. Sin embargo, en la vestuario culé tenían muy claro que el Madrid podría con el Valencia.

Para Messi y sus compinches de la plantilla la clave para esperar el tropiezo del Madrid viene ahora: con la eliminatoria frente al Atlético y el duelo contra el Sevilla.

Los aliados argentinos de Messi estarán unidos por una misma causa: dejar al Madrid a cero. Lo intentará Simeone, con el reto de volver a repetir en la final de la Champions.

Y también lo intentará Sampaoli en su visita al Bernabéu. El futuro seleccionador argentino quiere hacer un regalo a su estrella antes del Mundial de Rusia: una victoria. 

Presión en el Madrid

Cristiano Ronaldo, al tanto de todo lo que se le viene encima, sigue sin estar inspirado. Marca goles, pero no desequilibra. Ni siquiera celebra los tantos de su amigo Marcelo.

El luso tiene en alerta a Zidane y todos sus compañeros, conscientes de que ahora les van a saltar todos los enemigos al cuello. Messi pegó el primer golpe en Chamartín pero puede no ser el último. 

La presión está sobre los hombros de la escuadra blanca. Incluso, desde dentro del propio vestuario, con una segunda línea de cracks que juega mucho mejor que el equipo titular de Zidane.