La salida a Bolsa del Real Madrid

El club que preside Florentino Pérez se prepara para convertirse en una SAD

El Real Madrid lleva más de una década en lo más alto de la clasificación de los clubes con más ingresos, según el informe anual de Deloitte. Con los 577 millones en entradas en 2014-15, ya son 11 las temporadas consecutivas del equipo en la cima. Y con ellas, los rumores de conversión en Sociedad Anónima Deportiva (SAD) y posterior salida a Bolsa. Los analistas valoran hoy que el precio del Real superaría los 1.000 millones de euros.

El primer puesto del Madrid tiene mérito, ya que es propiedad de sus socios, ante entidades privadas que están en manos de grandes capitales extranjeros. Dicen en el club que todo es fruto de «una gestión pura de empresa que debe crecer cada año», pero sin serlo. La clave de este crecimiento exponencial, que dio el salto con la llegada de Florentino Pérez a la presidencia, se debe especialmente al incremento de los ingresos comerciales: antes de Floro, el club registraba poco más de 100 millones en ingresos; hoy factura 600 millones.

De Madrid a Wall Street

Los expertos consultados por Diario Gol sugieren que en el Real Madrid «se dan las condiciones ideales para salir a Bolsa, y lo acabará haciendo, no solo en el parqué madrileño, sino que se posicionará como el Manchester United, en Wall Street». La conversión a SAD daría más fuerza en el mercado a un club en el que los socios cada vez tienen menos peso, y permitiría a la entidad la lucha en igualdad de condiciones con los privados equipos de la Premier League. Sería una empresa en toda regla, con salida a Bolsa, y sería la más poderosa del sector. 

En relación a los rumores de este proceso, hace unos meses salió a la luz una información sobre la posible salida a Bolsa del Real Madrid con una supuesta OPV de 3.500 millones de euros. El coste por acción oscilaría entre 15,5 euros y 17,5 euros según los cálculos más conservadores, aunque es posible que estuviera más cerca de los 25 euros. La buena marcha económica de la entidad y el nombre que tiene en el mundo atraerían, sin duda, a todos los inversores.

Una ley a medida

El Real Madrid, sin embargo, es por ahora un club (también el Barça y el Athletic), hecho que ha disparado las alarmas en Europa. Según las investigaciones, se habría favorecido de ser un club deportivo y evitar así los costes de ser una SAD (como el Impuesto de Sociedades). La entidad, queda dicho, no ha incumplido nada, ya que mediante una disposición adicional a la ley de Sociedades Anónimas Deportivas de 1990 se libró de la conversión por presentar saldo patrimonial positivo desde el ejercicio 1985-86. Una ley, no obstante, hecha a medida de los grandes.