La herencia de Florentino Pérez destripa al Real Madrid

Los caprichos del presidente lastran a un equipo muy mal confeccionado

Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, también ejerce de director deportivo. El máximo dirigente escucha las peticiones de los entrenadores, pero muchas veces ficha a los jugadores que considera más rentables para la entidad. El problema es que tiene muchos cromos repetidos, muchos mediapuntas reconvertidos a centrocampistas, como Isco y James. En cambio, no tiene a un líder como Xavi o Iniesta.

El Real Madrid tiene una plantilla descompensada. Y la clave de sus problemas, según algunos técnicos, está en el centro del campo. Isco y James juegan en una posición más retrasada de la que desearían. Y lo mismo pasa a veces con Modric y Kroos, que tienen muchos problemas cuando juega como mediocentro. En esta posición pueden jugar Casemiro y Kovacic, dos jugadores del agrado de Rafa Benítez que no seducen a Zinedine Zidane. Son dos futbolistas de mucho desgaste físico, pero poco exquisitos con el balón.

Zidane busca ahora el máximo equilibrio en una plantilla configurada a base de talonario, sin mucho criterio deportivo. Al Madrid le falta finura en la creación y, por dicho motivo, se siente más cómodo con transiciones rápidas que jugando en corto. El técnico francés quiere cambiar el modelo, pero no tiene las piezas adecuadas. Y, lo peor, sabe que Florentino fichará en verano a los futbolistas que encajen mejor en su modelo y no en la pizarra del entrenador.