La fama de pesetero de Iker Casillas llega a los despachos de Bankia

El portero del Oporto renuncia a los 24.000 euros de intereses por los 480.000 euros invertidos que le ofrece la entidad financiera

Iker Casillas se ganó la fama de pesetero en el Real Madrid. Cuando todavía le quedaban dos años de contrato, el portero buscó una salida del club de sus amores junto a Florentino Pérez. Casillas quería salir del Madrid, pero no sin cobrar buena parte del salario que le quedaba pendiente por contrato. El Madrid se tuvo que rascar el bolsillo y el Oporto, su nuevo club, asumió la parte restante del sueldo del jugador para garantizar que, durante esos dos años, Casillas seguiría cobran el mismo dinero que percibía en el Madrid.

A muchos madridistas no les gustó aquella treta, similar a la que hizo Xavi Hernández con el Barça, siendo ésta silenciada. Bankia, la antigua Caja Madrid después de ser rescatada por el Estado, sufre ahora en sus carnes la ambición económica de Casillas.

El conflicto Casillas-Bankia

Casillas, la imagen publicitaria de la que ha tirado el despacho de abogados Arriaga Asociados para captar clientes afectados por la salida a bolsa de Bankia, ha decidido seguir con el pleito contra la entidad financiera, según la agencia Servimedia, en lugar de aceptar la propuesta a la que se han acogido ya unos 50.000 pequeños accionistas, de recuperar lo invertido más un interés del 1% anual.

En el caso del ex portero del Real Madrid, fueron un total de 480.000 euros los invertidos, la mitad de manera personal y el resto a través de una sociedad de su propiedad. De haber aceptado la oferta realizada por la entidad presidida por José Ignacio Goirigolzarri, además del principal hubiera recibido unos 24.000 euros en concepto de intereses.

Del 1% al 4%

Ahora, si el guardameta no cambia de opinión de aquí al 18 de mayo, habrá que esperar a que su pleito se resuelva para ver el interés que recibe.

Teniendo en cuenta que los magistrados están saldando las demandas con un interés de demora en torno al 4% anual, caso de que la sentencia se dictara este año, Casillas recibiría en torno al 20% de intereses, unos 100.000 euros, por los cinco años transcurridos desde la compra de las acciones.

Cantidad bruta de la que deberían descontarse los honorarios del despacho de abogados que le llevan el caso, a los que acudió el pasado mes de octubre de 2015. «Tengo el derecho a pelear por algo que es mío. Y no creo que a nadie le importe la cantidad que meta o deje de meter», argumentaba entonces el cancerbero.