La cortina de humo de Leo Messi

El astro argentino sigue tratando con absoluto sigilo todo lo que le concierne

No es un espía secreto, ni tampoco Manu Chao. Pero es el mejor futbolista del mundo. Y cuando se trata de él, hay algunos asuntos que son cuestiones de Estado. Alto secreto. Nadie puede saber nada. Ya sea de su intimidad en Barcelona, como de sus molestias, problemas anímicos y/o lesiones. Cuando se trata de Leo Messi, todo se lleva de forma casi clandestina.

Poco se ha dicho del estado de salud de Messi tras la lesión que le obligó a volver de la convocatoria con la selección argentina. El astro fue, marcó y cumplió. Argentina ganó a Uruguay y aproximó su clasificación para la Copa del Mundo de Rusia 2018. Estaba hecho casi todo el trabajo y Messi debía regresar a Barcelona. Era parte del pacto que avanzó GOL.

Ese acuerdo con el cuerpo técnico preveía que Messi viajaría con la albiceleste a pesar de sus molestias en el pubis. Preveía que Messi jugaría contra Uruguay y que, en función del resultado, volvería antes del duelo contra Venezuela. Así ocurrió. Estaba pactado.

La realidad es que las molestias de pubis eran peccata minuta. El jugador está bien, según desvela Marca, pero se han mediatizado esos leves problemas en el pubis para justificar su marcha después de todo el lío que se armó durante el verano a causa de su abandono de la selección argentina. No hay lesión.