Koeman lo quiere fuera del Barça antes del 31 de agosto: sentenciado al confirmarse la gran sospecha

El técnico del Barça Ronald Koeman pone la cruz definitiva a un jugador azulgrana

Ronald Koeman
Ronald Koeman

Ronald Koeman siempre se ha caracterizado, al menos desde que es entrenador del Barça, por ser un tipo que siempre está del lado de sus jugadores. Un buen ejemplo de ello fueron sus palabras tras el empate del conjunto azulgrana en San Mamés ante el Athletic de Bilbao, donde los culés no dejaron precisamente una buena imagen.

“Nos complicamos al principio y ellos nos apretaron bien. Hay que saber cuándo se puede jugar en corto. Después mejoramos, hay que destacar la actitud del equipo. El empate es justo, he visto un rival de mucho nivel, no puedo estar descontento”, apuntó.

Un resumen del partido que, desde luego, la gran parte de la afición azulgrana seguro que no firmarían. Ente otras cosas porque, pese a que Koeman apunte lo contrario, el Athletic fue muy superior al Barça en la gran mayoría de fases del encuentro.

Koeman le pide a Joan Laporta que lo eche y busque un buen relevo

Pero una cosa es lo que apunta Koeman de cara a la galería y otra muy diferente lo que apunta de forma interna. Ahí, tras el partido de ayer, un nombre cobra mucho protagonismo: Martin Braitwaite.

El delantero danés volvió a demostrar ante los bilbaínos que su buen juego ante la Real Sociedad en la primera jornada fue un espejismo. Apenas tuvo contacto con el balón y la oportunidad más clara del partido para los culés estuvo en sus botas al inicio del partido, pero la envió a las nubes.

Martin Braithwite
Martin Braithwite

Koeman lleva tiempo reclamándole a Laporta otro delantero, y la actuación de Braithwaite ayer, que cabe recordar que si el danés está jugando es porque no están disponibles ni Dembélé ni Ansu Fati, es el mejor argumento del holandés de cara al presidente.

Ronald ha sentenciado a Martin de forma definitiva y si se acaba quedando no será precisamente porque el técnico así lo haya pedido. Más bien lo contrario. El problema para Koeman es que, con el drama económico que se vive en el Camp Nou, no parece que el club tenga mucho margen de maniobra.