Juego sucio en la renovación de Neymar por el Barça

Los grandes clubes conocen las dificultades económicas de la entidad azulgrana, y el conflicto que puede tener el '11' con Messi a medio plazo

Atención: polémica a la vista. El Barça tiene la difícil papeleta de gestionar la mejora contactual de Neymar en un momento en el que las cuentas del club no son boyantes para acometerla y con la perspectiva que Leo Messi comenzará a bajar su rendimiento a medio plazo. La situación actual prevé que en unos años habrá dos gallos en el vestuario azulgrana, y el peor parado será, por edad, el cuatro veces ganador del Balón de Oro. Los grandes de Europa quieren pescar en río revuelto. Juego sucio, lamentan en los despachos de Arístides Maillol.

La continuidad de la pareja Neymar-Messi en el Barça a largo plazo parece una utopía. Uno tiene que salir. En el escenario actual es inviable que el club mejore la ficha del brasileño hasta las cifras que mueve el argentino sin que se resientan, y mucho, las cuentas de la entidad. Los ingresos actuales no permiten tal esfuerzo. Ni por estatutos, ni por el fair play financiero que marca la UEFA. Tampoco son positivas las sensaciones de que, en pocos años, Neymar superará a Messi. Y puede haber problemas de ego en el vestuario (y en el entorno de los jugadores). El Barça lo sabe e intentará hacer malabarismos para gestionar esta situación, mientras, sobre todo Ney, escucha ofertas de jegues y magnates.

Dos veces Florentino

El PSG, el Manchester United y el Real Madrid son, hoy por hoy, los únicos con capacidad de pagar la cláusula de rescisión de Neymar (190 millones) y darle todo lo que pida. Mínimo, 20 millones netos por temporada. Igual que Messi. El club parisino necesita un revulsivo para afrontar, al fin, la conquista de la Champions; los ingleses quieren recuperar su sitio en el fútbol europeo, y los blancos buscan relevo a Cristiano Ronaldo. Todos han contactato ya con el entorno del crack. Es público. Florentino, de hecho y según ha sabido este medio, ha mandado a emisarios para que intenten convencer a Ney.

El Madrid, el mismo que enredó y encareció el fichaje de Neymar por el Barça, quiere darle un segundo golpe bajo al eterno rival con el mismo jugador. Que Ney, de 23 años, coja el puente aéreo y emule a Luis Figo provocaría el derrumbe del Camp Nou. Y en el Bernabéu llevan mucho tiempo sin ganar una Liga. El triplete ni lo sueñan.