Joan Laporta estuvo atento a dos jugadores del Benfica en el duelo de Champions League

El Barça de Joan Laporta volvió a dar una mala imagen en la Champions League con una durísima derrota en Da Luz contra el Benfica

Joan Laporta Barça
Joan Laporta Barça

El Barça de Ronald Koeman volvió a decepcionar en la Champions League y el técnico holandés está en la cuerda floja. La durísima derrota en Da Luz dejó al barcelonismo tocadísimo ya que por segundo partido consecutivo en la competición continental volvieron a quedarse sin disparar a portería. Darwin Nuñez con dos tantos y uno de Rafa Silva firmaron un 3-0 que duele mucho a un Barça que tiene futuro pero no presente.

El Benfica llegaba al encuentro dando mucho respeto al Barça que no se podía permitir un tropiezo tras la dura derrota por 0-3 en el Camp Nou ante el Bayern de Múnich de Julian Nagelsmann en el primer partido de Champions League. Sin embargo, para Joan Laporta más que respeto había curiosidad.

El presidente del FC Barcelona tiene dos jugadores del Benfica en su agenda para el futuro cercano del conjunto azulgrana y es por ello que quería ver de primera mano si estaban preparados para vestir la camiseta del Barça.

Esos dos jugadores eran el canterano azulgrana Alejandro Grimaldo, quien desde el club siempre se ha considerado como el heredero natural de Jordi Alba en el Barça, y el mediocentro alemán Julian Weigl, quien ha recuperado su fútbol tras abandonar un Borussia Dortmund que no jugaba al estilo de fútbol de asociación que él tenía en su ADN.

Alejandro Grimaldo

Se rumorea que ambos futbolistas salieron en la comida entre directivas que hubo previa al partido, ya que el Barça quería saber la situación de esos jugadores y la posibilidad de mandar futbolistas cedidos al conjunto que dirige el veterano Jorge Jesús. El nombre de Álex Collado también estuvo sobre la mesa, pero para seguir el camino contrario.

El Benfica podría pedir una cifra cercana a los 50 millones de euros por los dos jugadores que interesan al Barça. Alejandro Grimaldo está valorado en 25-28 millones de euros y es considerado uno de los mejores lateral ofensivos del mundo a sus 26 años. Por su parte, Julian Weigl, que tiene la misma edad, tiene un valor estimado por Transfermarkt de 20 millones de euros y está recuperando el juego que lo puso en la agenda de todos los grandes del fútbol europeo.